El Ayuntamiento de Vila-real y Cáritas cierran un protocolo para la acogida de emergencia de personas sin hogar en el centro San Pascual ‘El Pati’.
El Ayuntamiento de Vila-real y Cáritas Diocesana de Segorbe-Castellón han cerrado un protocolo de actuación que establece la reserva de una plaza de acogida de emergencia en el centro San Pascual ‘El Pati’ para personas sin hogar. Este centro, que abrió las puertas de su nuevo edificio hace un año, continúa siendo un recurso clave para la atención y reintegración de este colectivo vulnerable.
El concejal de Servicios Sociales, Toni Marín, visitó recientemente el centro para conmemorar su primer aniversario y revisar el funcionamiento de este espacio social. Marín destacó la importancia de este centro en el proceso de promoción social, donde se acompaña y atiende a personas sin hogar para que puedan adquirir autonomía en las actividades cotidianas y reintegrarse a la sociedad. Actualmente, 17 residentes se benefician de este recurso, y el acuerdo con Cáritas también prevé un protocolo específico para casos de emergencia.
Gracias a este protocolo, se reserva una plaza en el centro de acogida para las situaciones gestionadas por la Policía Local, cuando se detecte a personas sin hogar que necesiten atención inmediata. El concejal Toni Marín explicó que se trata de un protocolo para emergencias cuando no haya plazas disponibles en el Centro de Acogida Temporal de Cáritas Diocesana en Castellón. En esos casos, la persona, que debe ser mayor de edad y autónoma, podrá utilizar la plaza reservada en la Casa de Acogida San Pascual ‘El Pati’ de Vila-real entre las 22.00 y las 7.00 horas. Si la persona está empadronada en Vila-real, deberá acudir al departamento de Servicios Sociales al día siguiente; en caso contrario, deberá dirigirse al Servicio de Acogida de Cáritas Diocesana en Castellón.
Marín subrayó que este protocolo permite dar una respuesta más ágil a situaciones de emergencia, siempre en coordinación con Cáritas Diocesana y los Servicios Sociales. Destacó que Cáritas es una entidad fundamental en la alianza social de Vila-real para lograr una ciudad más solidaria e inclusiva, donde nadie se quede atrás.
Este protocolo complementa la actividad del centro San Pascual ‘El Pati’, que durante su primer año de actividad ha acogido a 32 personas. Estas personas no solo han podido convivir y compartir experiencias, sino que han tenido la oportunidad de reintegrarse a la sociedad.
Es muy gratificante comprobar cómo estas personas tienen la posibilidad de sentir que este centro es su hogar, es un refugio en el que se sienten arropados y acompañados en el proceso para volver a la vida en sociedad.
Señaló el concejal de Servicios Sociales.
Marín también expresó su agradecimiento al trabajo de los voluntarios y responsables de Cáritas Diocesana, así como al director de la Casa de Acogida, Antonio Amurrio. A la visita de este primer aniversario también asistieron el delegado episcopal de Cáritas Diocesana de Segorbe-Castellón, Sergio Mendoza, el director de la entidad, Francisco Mir, y representantes de la Asociación de Vecinos de San Fernando, junto a algunos de los primeros residentes de ‘El Pati’.
El nuevo edificio de la Casa de Acogida, situado en la calle Sant Marc, fue posible gracias a la colaboración del Ayuntamiento de Vila-real, que aportó 300.000 euros para su construcción, además de 10.000 euros para el equipamiento. La aportación municipal también se incrementó para colaborar en la puesta en marcha de este espacio dedicado a la inclusión.