Apagón masivo en España y Portugal: El día que nos quedamos sin electricidad

Apagón masivo en España y Portugal: El día que nos quedamos sin electricidad

La caída por completo del sistema eléctrico en España, arrastrando los sistemas de comunicaciones, nos dejo sin luz, internet y teléfono, paralizando de manera inesperada a todo el país

 

Este 28 de abril de 2025, España y Portugal se sumieron en un caos sin precedentes debido a un apagón eléctrico masivo que dejó sin luz a millones de personas en toda la península ibérica. Este incidente, descrito como «absolutamente excepcional» por Red Eléctrica de España (REE), marcó un hito en la historia energética de ambos países. A continuación, se presenta un resumen detallado de los eventos, las consecuencias y los avances en la recuperación del suministro, basado en la información recopilada hasta este momento.

El Inicio del Apagón: 28 de abril de 2025

A las 12:32 horas del 28 de abril, el suministro eléctrico en la España peninsular y Portugal colapsó repentinamente. Según REE, el consumo eléctrico, que se situaba en torno a los 25.184 megavatios (MW), cayó abruptamente a 12.425 MW en cuestión de minutos, lo que se conoce como un «cero energético». Este fenómeno, provocado por una «oscilación muy fuerte del flujo de potencia de redes», desconectó el sistema eléctrico español del resto de Europa, afectando también a Portugal y, en menor medida, al sur de Francia, Andorra e Italia.

Las causas del apagón aún no están claras. Aunque inicialmente se especuló con un posible ciberataque, tanto la Comisión Europea como el presidente del Consejo Europeo, Antonio Costa, descartaron esta hipótesis. En Portugal, el Operador de la Red de Energía (REN) señaló que el fallo podría estar relacionado con un «fenómeno atmosférico raro» con variaciones extremas de temperatura que afectaron la red eléctrica española, de donde aparentemente se originó el problema.

Impacto Inmediato: Caos en Infraestructuras y Servicios

El apagón paralizó prácticamente todos los sectores de la sociedad. En España, el transporte público quedó inoperativo: los metros de Madrid, Barcelona y Valencia suspendieron sus servicios, y Adif informó la paralización total del tráfico ferroviario, dejando a entre 30.000 y 35.000 pasajeros varados en trenes. Renfe anunció la gratuidad de los servicios de Cercanías para el 28 y 29 de abril, en caso de que se restableciera la circulación.

Los aeropuertos, aunque operativos gracias a generadores de emergencia, sufrieron retrasos significativos. En el Aeropuerto Adolfo Suárez Madrid-Barajas, se cancelaron 344 de los 6.000 vuelos programados. En Lisboa, el aeropuerto Humberto Delgado reportó colas masivas, falta de aire acondicionado y transacciones limitadas a efectivo.

El tráfico en las grandes ciudades se convirtió en un caos debido a la inactividad de los semáforos. En Madrid, las arterias principales como la Castellana y la Gran Vía quedaron colapsadas, y la Dirección General de Tráfico (DGT) instó a la población a evitar desplazamientos en coche. La policía se desplegó para regular manualmente la circulación, mientras que en Madrid se cerraron los túneles de la M-30 por seguridad.

Los hospitales, aunque equipados con generadores de emergencia, enfrentaron desafíos. Endesa recomendó a los clientes electrodependientes acudir a centros médicos, y el Hospital La Paz de Madrid implementó medidas de ahorro energético, como apagar luces en pasillos.

Eventos como el Mutua Madrid Open de tenis fueron suspendidos, y comercios, supermercados y bancos cerraron o limitaron sus operaciones. En la Comunidad Valenciana, los consumidores abarrotaron tiendas en busca de agua, alimentos no perecederos y productos básicos, evocando escenas de la pandemia de 2020.

Respuesta de las Autoridades y Progresos en la Recuperación

Desde el primer momento, Red Eléctrica activó planes de reposición del suministro en colaboración con empresas del sector. A las 13:30, se comenzó a recuperar tensión en las zonas norte y sur de la península, gracias a las interconexiones con Francia y Marruecos, así como al arranque autónomo de centrales hidroeléctricas. Para las 19:00, el suministro se había restablecido en regiones como Andalucía, Cataluña, Aragón, País Vasco, Galicia, Asturias, La Rioja, Navarra, Castilla y León, Extremadura, Comunidad Valenciana, Murcia, Castilla-La Mancha y Madrid. A las 22:30, REE reportó que el 48,2% de la demanda estaba recuperada, y para las 6:00 del 29 de abril, el 99,16% del suministro peninsular estaba restablecido.

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El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, compareció desde La Moncloa tras presidir una reunión extraordinaria del Consejo de Seguridad Nacional. Sánchez instó a la calma, pidió un uso responsable de los móviles para evitar la saturación de las redes y recomendó informarse solo por canales oficiales para evitar bulos. Agradeció la colaboración de Francia y Marruecos y señaló que, aunque no había datos concluyentes sobre las causas, no se descartaba ninguna hipótesis.

En Portugal, el primer ministro Luis Montenegro confirmó que el problema se originó en España y formó un grupo de trabajo para supervisar la crisis. La vicepresidenta de la Comisión Europea, Teresa Ribera, coordinó esfuerzos con autoridades nacionales y europeas, descartando un ciberataque y limitando el alcance del apagón a la península ibérica.

Varias comunidades autónomas, incluidas Andalucía, Extremadura, Murcia, La Rioja, Madrid, Galicia, Castilla-La Mancha y la Comunidad Valenciana, solicitaron la declaración de emergencia nacional para coordinar la respuesta. En Madrid, la presidenta Isabel Díaz Ayuso activó la fase de emergencia del Plan de Emergencias Municipales, mientras que en Valencia, el president Carlos Mazón convocó una reunión de seguimiento para evaluar el impacto.

El pleno del Consell, a propuesta del Conseller de Emergencias e Interior, adoptó la resolución para solicitar al Gobierno de España la declaración de la situación de emergencia de interés nacional en toda la Comunitat Valenciana como consecuencia del corte masivo de energía.

Situación al 29 y 30 de abril de 2025

Hoy 29 de abril, la recuperación del suministro avanzó significativamente, aunque algunas zonas, especialmente en la Comunidad Valenciana, seguían con un restablecimiento lento (entre el 20% y 25% a las 19:30 del 28 de abril). A las 22:00, el 74% de la red valenciana estaba operativa, pero 950.490 usuarios de los 3,6 millones en la región aún carecían de luz.

Esta pasada noche el 50% de España seguía sin energía, con proyecciones de que el caos en comunicaciones, abastecimiento de alimentos, servicios de salud y educación persistiría durante el martes y miércoles. Estas afirmaciones, sin embargo, no están completamente respaldadas por fuentes oficiales, que reportaron un restablecimiento casi total del suministro.

Para mañana 30 de abril, no hay datos específicos sobre cual será la situación, pero el progreso reportado hasta primera hora de este 29 de abril sugiere que la mayoría de las áreas afectadas recuperaron el suministro, aunque con posibles interrupciones intermitentes en zonas rurales o menos conectadas. La investigación sobre las causas continúa.

Reflexiones Finales: Una Lección de Vulnerabilidad

El apagón del 28 de abril de 2025 expuso la fragilidad de las infraestructuras críticas en un mundo hiperconectado. La rápida respuesta de las autoridades y la colaboración internacional evitaron consecuencias aún más graves, pero el incidente plantea interrogantes sobre la resiliencia de los sistemas eléctricos frente a fenómenos inesperados, ya sean atmosféricos o de otra índole. Mientras España y Portugal trabajan para volver a la normalidad, este evento histórico probablemente impulsará revisiones profundas en la gestión de las redes eléctricas y la preparación para futuras crisis.