La Fiscalía de Valencia ha archivado el caso, al no encontrar pruebas de que las declaraciones de la exconsellera Elisa Núñez constituyan un ilícito penal.
La Fiscalía Provincial de Valencia ha decidido archivar la investigación abierta a la exconsellera de Justicia e Interior Elisa Núñez por un supuesto delito de odio, tras sus controvertidas declaraciones sobre el crimen ocurrido en Gata de Gorgos (Alicante) el año pasado. En sus palabras, Núñez había referido la detención de varias personas de origen marroquí y acusó a la izquierda de «poner en peligro nuestro pueblo con su ceguera ideológica».
La sección de delitos de odio de la Fiscalía de Valencia ha determinado el archivo del caso, concluyendo que no se ha demostrado que las declaraciones de la exconsellera constituyan un ilícito penal. Elisa Núñez, exafiliada de Vox, fue objeto de una denuncia presentada por el PSPV en julio pasado, lo que motivó la apertura de la investigación por parte de la Fiscalía.
La delegada de la sección de delitos de odio, Susana Gisbert, fue la encargada de tramitar este asunto. La controversia se remonta a finales de junio, cuando un hombre de 38 años murió presuntamente tras ser golpeado con un bate de béisbol. La Guardia Civil detuvo a tres varones de origen marroquí, quienes fueron señalados como presuntos responsables del crimen.
A raíz de este suceso, Elisa Núñez emitió un comunicado en el que expresó: «a nadie se le escapa que se trata de un nuevo y cruento recordatorio de que nuestra seguridad y nuestras vidas están siendo sacrificadas en nombre de los caprichos multiculturales de la izquierda», haciendo alusión a la procedencia de los detenidos. Además, acusó a la izquierda de «poner en peligro a nuestro pueblo con ceguera ideológica».
En el mismo comunicado, la exconsellera añadió que, aunque estaban a la espera de obtener más información sobre los hechos y la motivación de la agresión, no podía obviar lo que consideraba un «nuevo y cruento recordatorio» de que la seguridad estaba siendo sacrificada en nombre de «los caprichos multiculturales de la izquierda». También criticó que, desde noviembre, su partido había enviado varias cartas al ministro del Interior para expresar sus preocupaciones y pedir soluciones urgentes para abordar problemas graves como el sucedido en Gata de Gorgos, pero sus peticiones fueron ignoradas.
Tras conocer la denuncia del PSPV, Núñez se defendió públicamente asegurando que sus declaraciones buscaban «un debate legítimo en el campo de la libertad de expresión» y rechazó cualquier acusación de racismo o xenofobia.
Fotografía portada: Exconsellera de Justicia e Interior Elisa Núñez – Archivo GVA.