
La provincia de Castellón enfrenta un reto demográfico, con 110 municipios de menos de 5.000 habitantes, de los cuales 83 (el 61%) están en riesgo de despoblación.
La Diputación Provincial de Castellón ha reafirmado su compromiso en la lucha contra la despoblación y la creación de oportunidades en el mundo rural a través de su participación en la jornada ‘Empuéblate‘. Este evento, de referencia nacional, se ha celebrado en el Palacio de Congresos de Eurocaja Rural de Toledo y ha contado con la presencia de la vicepresidenta de la institución provincial, María Ángeles Pallarés.
Durante su intervención, Pallarés ha subrayado que «la lucha contra la despoblación y la atención a los municipios más pequeños de la provincia es una prioridad del Gobierno de la Diputación de Castellón».
Asimismo, ha destacado la importancia de la implicación de la institución en la generación de recursos y oportunidades para evitar el abandono de las zonas rurales. «En el equipo de Gobierno Provincial entendemos que es nuestra obligación estar en la vanguardia de la lucha contra la despoblación para crear recursos útiles a los vecinos y vecinas de Castellón para frenar esta lacra que afecta a las zonas rurales de nuestra provincia».
Queremos futuro para nuestros pueblos y eso pasa por poner recursos a disposición de las necesidades que nos plantean los alcaldes y que ayudan a que las familias decidan quedarse en sus pueblos.
Ha agregado.
En el evento organizado por la Fundación Eurocaja Rural, María Ángeles Pallarés ha sido una de las protagonistas de la mesa redonda titulada ‘Políticas activas contra la despoblación’, moderada por Manuel Campo Vidal. En este espacio, ha compartido reflexiones junto a la presidenta de la Diputación de Toledo, Concepción Cedillo, el consejero de Política Local, Infraestructuras y Lucha contra la Despoblación de La Rioja, Daniel Osés y el diputado de Reto Demográfico de la Diputación de Cuenca, Francisco Javier Cebrián.
En su intervención, Pallarés ha resaltado el papel fundamental de las diputaciones en la lucha contra la despoblación. «Las diputaciones, como ayuntamiento de los ayuntamientos, tenemos el deber de ayudar a nuestros pueblos y ciudades, trabajar para ofrecer las mismas oportunidades económicas a todos los ciudadanos y mejorar la calidad de vida de los vecinos y vecinas, especialmente, de aquellos que viven en municipios pequeños, porque son los que menos recursos tienen», ha asegurado.
La provincia de Castellón enfrenta un desafío demográfico significativo, con 110 municipios de menos de 5.000 habitantes, de los cuales 83 están en riesgo de despoblación, lo que representa el 61% del total de localidades.
Ante esta situación, la Diputación ha desarrollado diversas iniciativas para fijar población en el territorio.
Uno de los proyectos destacados es el plan ‘Pobles amb Futur’, el cual, según Pallarés, «trabaja para que vivir en el interior nunca pueda ser una barrera, sino una oportunidad. Este plan es un reflejo de ese trabajo, ya que busca sumar más seguridad, movilidad, infraestructuras, conciliación y economía en los pequeños municipios de la provincia».
En su discurso, también ha hecho hincapié en la importancia de garantizar el abastecimiento de agua en los municipios afectados por la sequía.
Estamos haciendo una inversión muy fuerte para garantizar el abastecimiento de agua potable en los municipios de la provincia, con el objetivo de atender las necesidades en materia de infraestructuras hídricas debido a la sequía que padece nuestra zona.
Ha indicado la vicepresidenta.
Con estas medidas, la Diputación de Castellón busca dar respuestas efectivas a los problemas derivados de la despoblación y el envejecimiento de la población, generando oportunidades en los 135 municipios de la provincia. Finalmente, Pallarés ha concluido su intervención destacando la importancia de preservar la identidad y el patrimonio de Castellón: «Todos ellos son garantía de nuestro patrimonio, nuestra identidad y todo el conjunto de valores que hace de nuestra provincia una tierra única». Concluye.