Culla, una vez más, ejerce su magia para viajar en el tiempo hasta un momento histórico durante la Segunda Guerra Mundial, y se convierte en escenario de combates y desfiles, recreando la Operación Erika
El encantador municipio de Culla transporta a sus visitantes a través de su particular máquina del tiempo para revivir un acontecimiento crucial de la historia: la Segunda Guerra Mundial. Este año, se escenifica el asedio a Bastogne, un episodio clave en el que la tenaz resistencia de las tropas estadounidenses marcó el principio del fin para las opciones alemanas de ganar la guerra.
Así, el viernes 28 de febrero, las plazas de Juan Barceló y la Calle Saulons se transformarán en los campamentos de los ejércitos alemán y aliado, respectivamente.
El sábado 1 de marzo, a partir de las 10:30 h, con la apertura de los campamentos, los recreacionistas harán revivir los momentos más representativos de la historia. La jornada culminará a las 12:30 h con una espectacular batalla entre el ejército aliado y las tropas del Eje, que se llevará a cabo en el camino de la Solera La Lloma.
De 14:00 h a 16:30 h, los campamentos reabrirán y tanto vecinos como visitantes podrán disfrutar de la gastronomía del Alt Maestrat en los restaurantes locales.
Por la tarde, a las 19:30 h, tendrá lugar otro combate en las calles del pueblo, cuando los soldados aliados intenten salir del municipio, mientras las fuerzas del Eje tratarán de impedirlo.
Para finalizar un fin de semana lleno de emociones, el domingo 2 de marzo, las actividades comenzarán a las 11:30 h con un nuevo enfrentamiento entre ambos ejércitos, seguido de la rendición del alto mando alemán, quien será llevado al campamento aliado como prisionero. A continuación, se entregarán banderas a los asistentes para recibir a los aliados durante los dos desfiles que seguirán.
Se solicita a los asistentes que, durante los combates, no interfieran ni interactúen con los recreacionistas, limitándose a ser espectadores de los eventos.
Además de disfrutar de estas actividades, los participantes podrán complementar su experiencia con visitas guiadas al casco histórico de Culla, declarado Bien de Interés Cultural, y al Parc Miner del Maestrat, situado a tan solo 10 minutos del municipio.
