
Vera Bou: "Es intolerable que, bajo el gobierno del PP, Castellón se convierta en un escenario de retroceso para los derechos de las mujeres."
Compromís per Castelló ha llevado al Pleno de enero una moción destinada a exigir al gobierno municipal que intervenga frente a las concentraciones organizadas por grupos antiaborto frente a una clínica de interrupción voluntaria del embarazo ubicada en el paseo del Ribalta, en pleno centro de la ciudad. Según denunció Vera Bou, portavoz adjunta del grupo municipal, estas concentraciones, encabezadas por la asociación «40 días por la vida», representan un evidente acoso hacia las mujeres que, ejerciendo su derecho, deciden interrumpir su embarazo.
«Es intolerable que la alcaldesa Begoña Carrasco y su gobierno permitan estas situaciones de intimidación contra las mujeres, mientras desde Compromís llevamos meses advirtiendo sobre el aumento de las acciones contrarias a los derechos de las mujeres en nuestra ciudad. Carrasco no puede mirar hacia otro lado mientras Castellón se convierte en un escenario de retroceso en derechos y libertades», afirmó Bou.
La moción presentada subraya que la Ley de Interrupción Voluntaria del Embarazo exige a las autoridades públicas garantizar que estas intervenciones se lleven a cabo respetando tanto el bienestar físico como psicológico de las mujeres. Además, solicita que la Policía Local actúe con diligencia, vigile e informe sobre cualquier acción de acoso, colaborando estrechamente con el Servicio de Igualdad de Oportunidades para asegurar que no se vulneren los derechos fundamentales de las mujeres.
Bou hizo hincapié en el impacto de las políticas ultraconservadoras tras la entrada de VOX en el gobierno municipal. «Hace un año ya vimos cómo se daba altavoz a entidades ultraconservadoras como Provida. Ahora, con estas concentraciones frente a una clínica de interrupción del embarazo, se hace evidente que las políticas del PP están permitiendo un retroceso en los derechos que las mujeres hemos conseguido tras décadas de lucha», advirtió.
Compromís ha señalado que estos hechos no solo representan una vulneración de los derechos de las mujeres, sino también un incumplimiento de la legalidad vigente. En este sentido, Bou destacó la urgencia de una respuesta contundente por parte del Ayuntamiento.
El acoso no es una opinión ni una protesta legítima. Es una agresión directa a los derechos de las mujeres. Carrasco tiene la obligación de actuar y demostrar si gobierna para todas las personas o solo para sus aliados ultraconservadores.
Aseveró.
La coalición valencianista considera que el acoso a mujeres en momentos tan delicados es una expresión de intolerancia y odio que Castellón no debe tolerar. «Los derechos de las mujeres no son negociables. Si el gobierno del PP no actúa, estará demostrando que está más preocupado por no molestar a sus socios de VOX que por defender la igualdad y la dignidad de las mujeres», concluyó Bou.
Compromís confía en que la moción será respaldada por las demás fuerzas políticas democráticas del consistorio. Asimismo, ha reiterado su compromiso de seguir trabajando para garantizar que Castellón sea una ciudad donde se respeten los derechos y se promuevan las oportunidades para todas las personas.