Durante esta operación, se detuvieron a seis mujeres y cuatro hombres, con edades comprendidas entre los 26 y 64 años.
La Policía Nacional ha desarticulado en Alicante una organización criminal transnacional dedicada a la explotación sexual de mujeres en situación de vulnerabilidad. La operación culminó con la detención de diez personas, la liberación de nueve víctimas y la realización de cuatro entradas y registros en viviendas de la ciudad, donde operaban como prostíbulos las instalaciones utilizadas por la red.
Entre los arrestados se encuentran el líder de la organización y su hijo, quien gestionaba las empresas pantalla utilizadas para el cobro de los servicios sexuales y era propietario de uno de los inmuebles empleados como prostíbulo, según informó la Jefatura Superior en un comunicado oficial.
La organización estaba compuesta principalmente por ciudadanos colombianos que se encargaban de captar mujeres en el extranjero para explotarlas sexualmente en España. Estas víctimas eran obligadas a prostituirse en condiciones de hacinamiento, trabajando las 24 horas del día en dos viviendas situadas en Alicante. Además, eran sometidas a un control constante tanto por encargadas como por cámaras de videovigilancia. En los inmuebles también se distribuían sustancias estupefacientes, como cocaína, y pastillas potenciadoras del rendimiento sexual para los clientes.
En uno de los lugares donde se ejercía la prostitución, los integrantes de la red avisaban a las mujeres para que acudieran a ser elegidas por los clientes. Usaban un mando a distancia que hacía sonar un timbre en la zona donde las víctimas dormían, lo que las obligaba a realizar los servicios. En el transcurso de la investigación, los agentes de la Unidad Contra las Redes de Inmigración Ilegal y Falsedad Documental (Ucrif) en Alicante descubrieron que una de las víctimas había adquirido una deuda de 4.000 euros con el grupo criminal, lo que le impedía abandonar la vivienda hasta saldarla.
Condiciones deplorables y captación ilícita
Las condiciones en las que las víctimas vivían eran deplorables, con habitaciones pequeñas, sin ventilación ni luz natural, que eran compartidas por varias mujeres. Algunas zonas presentaban humedades visibles a simple vista. Además, la organización se encargaba de gestionar todo el proceso de traslado, que incluía la compra de pasajes de avión, reservas de hotel y otros trámites, además de instruir a las mujeres para que se presentaran como turistas si eran interrogadas por las autoridades fronterizas.
En el marco de esta operación, fueron detenidos seis mujeres y cuatro hombres, de entre 26 y 64 años. Nueve de los arrestados eran de nacionalidad colombiana y uno español. De estos, dos se encontraban en situación irregular en España y dos tenían antecedentes policiales.
Incautación de dinero y droga
Durante los registros realizados, la Policía Nacional intervino una pistola detonadora con 50 cartuchos de munición, 4.550 euros en efectivo, ocho datáfonos utilizados para procesar pagos, 20 gramos de cocaína, una báscula de precisión, 75 pastillas potenciadoras del rendimiento sexual, cinco cronómetros usados para controlar la duración de los servicios sexuales, nueve teléfonos móviles y abundante documentación relacionada con la explotación sexual de las víctimas y la gestión económica de la red. También se incautó una motocicleta, que se presume utilizada en las actividades delictivas de la organización.
La Policía Nacional señaló que el material incautado pone de manifiesto el «alto grado de organización» y la sofisticación de los métodos utilizados por esta red criminal para maximizar los beneficios obtenidos a través de la explotación sexual de las víctimas.
Tras las actuaciones realizadas, siete de los detenidos fueron puestos a disposición del juzgado de instrucción de guardia de Alicante.