El alcalde de Vila-real exige a la Generalitat que asuma el servicio de autobús a la UJI para los estudiantes.
El servicio de autobús lanzadera entre la sede de la Plana y el campus de Riu Sec de la Universitat Jaume I, que comenzó a funcionar de forma experimental en el curso 2017-2018, no estará disponible al inicio del próximo curso académico. Esta decisión ha sido tomada por el Ayuntamiento de Vila-real tras años de asumir un servicio que, según los informes técnicos, debería ser responsabilidad de la Generalitat Valenciana.
El alcalde de Vila-real, José Benlloch, expresa su orgullo por haber sido pioneros en ofrecer este servicio a los estudiantes, a pesar de que la Generalitat es la entidad que debería financiarlo. Benlloch subraya que el compromiso del municipio con los jóvenes y con la movilidad sostenible ha llevado a Vila-real a ser el único lugar que ofrece un servicio de autobús urbano completamente gratuito. Hasta ahora, la financiación del autobús a la UJI se había logrado gracias a una mejora en el contrato del bus Groguet, pero este periodo de mejora ha expirado, haciendo inviable continuar con el servicio.
Benlloch ha instado al Consell a que atienda las necesidades de los estudiantes y asegure la conexión del campus de la UJI con los municipios cercanos para garantizar la vertebración territorial y fomentar la movilidad sostenible. Además, ha solicitado al Gobierno central que incremente las frecuencias de los trenes a Castellón para mejorar la movilidad estudiantil.
El alcalde también ha pedido disculpas a los estudiantes que solían utilizar el autobús y ha anunciado que se están buscando soluciones alternativas para garantizar una conexión accesible, rápida y económica con la universidad. Entre las posibles iniciativas se contempla la promoción del uso compartido de vehículos entre los estudiantes que viajan diariamente al campus desde Vila-real. Según el departamento de Movilidad, alrededor de una veintena de estudiantes usaba el servicio en el curso pasado.
Fotografía portada: Archivo.
