El albergue cuenta con 39 plazas fijas y 20 adicionales, y opera cada noche desde el 1 de noviembre hasta el 30 de abril.
La alcaldesa de Castellón, Begoña Carrasco, ha destacado la labor del Albergue Municipal, gestionado por Cáritas, en la atención a las personas sin hogar. El albergue, que tiene una capacidad para 39 personas, amplió su capacidad con la activación del Protocolo contra el Frío, que sumó 20 plazas adicionales. Este protocolo, que normalmente se activa en diciembre, fue adelantado este año debido a la DANA, y se activó el 31 de octubre para garantizar la protección de los más vulnerables frente a la bajada de temperaturas.
Carrasco ha subrayado que “este dispositivo, además de dar respuesta a las necesidades inmediatas de las personas sin hogar o en riesgo de exclusión social, también contribuye a su proceso de inserción. No se trata únicamente de ofrecer un techo y una cama, sino de acompañarles en su camino hacia la recuperación de su autonomía y dignidad”.
La primera edil ha señalado que, en el mes de noviembre, el albergue municipal acogió a un total de 68 personas, que realizaron 1.586 pernoctaciones. La ocupación media diaria osciló entre 57 y 59 personas por noche, lo que muestra la demanda constante de este recurso. “El albergue cuenta con 39 plazas fijas y 20 adicionales, y opera cada noche desde el 1 de noviembre hasta el 30 de abril, pero debido a la alerta roja por la DANA, el servicio se activó con carácter extraordinario el 31 de octubre para garantizar una respuesta inmediata a las necesidades de los más vulnerables”, indicó la alcaldesa.
Carrasco ha insistido en la importancia del acompañamiento social, que incluye orientación, apoyo psicológico y derivaciones a otros servicios municipales para trabajar en la reinserción social de las personas atendidas. “Este protocolo es importante no solo desde el punto de vista asistencial, sino como un compromiso con la inclusión”, afirmó la alcaldesa.
Además, el servicio de comedor del albergue ha atendido a un total de 277 personas en noviembre, ofreciendo 2.994 servicios a lo largo del mes. El protocolo nocturno no solo proporciona un lugar seguro para pasar la noche, sino también una cama, cena, desayuno y acceso a duchas y otros servicios básicos.
La alcaldesa ha concluido su intervención resaltando el trabajo coordinado entre el área de Bienestar Social, Cáritas y otros recursos municipales. “Se seguirá reforzando este dispositivo durante los meses más fríos, garantizando que todas las personas en situación de vulnerabilidad tengan acceso a un lugar seguro, un trato digno y un acompañamiento integral. Este esfuerzo refleja la apuesta de Castelló por una ciudad que cuida y protege a todas las personas, especialmente en situaciones de mayor necesidad”, concluyó.
Fotografía portada: Archivo.