El alcalde Jorge Monferrer y técnicos municipales acudirán a Madrid por una denuncia de la Agencia Valenciana Antifraude sobre decisiones municipales de 2019.
El Ayuntamiento de Burriana ha sido citado como perjudicado ante el Tribunal de Cuentas en Madrid el próximo 26 de marzo debido a presuntas irregularidades urbanísticas relacionadas con el proyecto Sant Gregori. La Agencia Valenciana Antifraude denunció que en 2019 no se impusieron las penalidades correspondientes al agente urbanizador, lo que supone una posible responsabilidad contable por un importe estimado de 21.052.095,45 millones de euros.
A la comparecencia asistirá el alcalde de Burriana, Jorge Monferrer Daudí, acompañado por técnicos municipales, con el objetivo de exponer las alegaciones oportunas y analizar las repercusiones de la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).
El alcalde ha subrayado la importancia de tratar este proceso de manera rigurosa debido a las implicaciones legales que conlleva: «el proceso largo y tedioso que llevamos realizado, enviando las alegaciones oportunas y sobre todo trasladando las posibles consecuencias legales de la demoledora sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV) que afectan directamente a este caso».
El caso de Sant Gregori es uno de los proyectos urbanísticos más ambiciosos de la provincia de Castellón y de la Comunitat Valenciana, con una extensión de 2,5 millones de metros cuadrados en primera línea de costa. Actualmente, se desarrollan dos vías paralelas en torno al proyecto: por un lado, la investigación de las responsabilidades judiciales por la gestión anterior, y por otro, la garantía de su continuidad.
En este sentido, el Ayuntamiento de Burriana ha conseguido recuperar 9.511.946 euros de fondos públicos provenientes de las garantías y apremios. Asimismo, ha logrado el respaldo de todos los grupos políticos para asumir la gestión directa del proyecto, con el fin de potenciar la oferta turística de la localidad y proporcionar seguridad a propietarios e inversores.
La decisión de optar por la gestión directa está respaldada tanto por un informe encargado a una empresa experta en urbanismo, como por los técnicos municipales, quienes consideran esta alternativa como la más viable para concluir la urbanización y restaurar la confianza en el proyecto. De esta forma, Burriana sigue trabajando para asegurar el futuro de Sant Gregori, enfrentando los retos judiciales y administrativos que se derivan de la gestión previa.