Fallece David Lynch: el visionario director de ‘Twin Peaks’ y ‘Mulholland Drive’

Fallece David Lynch: el visionario director de ‘Twin Peaks’ y ‘Mulholland Drive’

Su estilo inconfundible, que combinó elementos de horror, cine negro y surrealismo europeo, marcó un antes y un después en el cine y la televisión.

 

David Lynch, el director y guionista que radicalizó el cine estadounidense con su visión surrealista y oscura en películas como ‘Blue Velvet’ y ‘Mulholland Drive’, y la televisión con ‘Twin Peaks’, ha fallecido este jueves, 16 de enero, a los 78 años. El director y guionista sufría de problemas pulmonares, según anunció en noviembre del año pasado.

Su estilo inconfundible, que combinó elementos de horror, cine negro y surrealismo europeo, marcó un antes y un después en el cine y la televisión. Su legado perdurará en las obras que transformaron la manera de contar historias en la pantalla, dejando una huella profunda que sigue influyendo en cineastas contemporáneos.

El cineasta, que también conoció el éxito por la serie ‘Twin Peaks’, filmó cintas como ‘El hombre elefante’ o ‘Una historia verdadera’, las cuales contribuyeron a cimentar su legado como uno de los directores más influyentes y visionarios de su tiempo. Reconocido por su exploración de lo extraño y lo radical, Lynch se consolidó como un creador fuera de lo convencional.

“Hay un gran vacío en el mundo ahora que ya no está con nosotros. Pero, como él diría, ‘Mantén la vista en el donut y no en el agujero’”, compartió su familia en redes sociales este jueves, destacando una de las frases más emblemáticas de su carrera.

Lynch, un inconformista director estadounidense, tuvo una carrera de éxito en el cine mainstream pero también se adentró en lo experimental, creando películas que, a pesar de su naturaleza peculiar, recibieron una gran aclamación crítica. Desde sus primeros cortometrajes como estudiante de arte hasta su consagración como uno de los cineastas más visionarios de Hollywood, su camino estuvo marcado por una constante exploración de nuevas formas de narrar y desafiar las convenciones cinematográficas.

Su primer largometraje, ‘Eraserhead’ (Cabeza borradora), de 1977, se convirtió en un éxito de culto que le permitió ganar notoriedad, aunque inicialmente fue recibido con desconcierto. A lo largo de su carrera, el cineasta destacó con obras como ‘Blue Velvet’, ‘Corazón salvaje’ y ‘Mulholland Drive’, así como la famosa serie de televisión ‘Twin Peaks’, que también cimentó su estatus de genio creativo.

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Lynch recibió tres nominaciones al Oscar al mejor director por ‘Blue Velvet’, ‘El hombre elefante’ y ‘Mulholland Drive’, y en 2019 se le otorgó un Oscar honorífico por toda su carrera. En 1990, ganó la Palma de Oro en el Festival de Cannes por ‘Corazón salvaje’, otra de sus obras más aclamadas.

Nacido en Missoula (Montana) en 1946, Lynch estudió arte en la universidad durante los años 60 y comenzó su carrera realizando cortometrajes experimentales. Su primer trabajo como cineasta, ‘Six Men Getting Sick’, lo realizó mientras estudiaba en la Academia de Bellas Artes de Pensilvania. Tras mudarse a Los Ángeles en 1971 y estudiar cine en el Conservatorio AFI, comenzó a rodar su primer largometraje, ‘Eraserhead’, una fábula surrealista en blanco y negro que, tras ser rechazada en la mayoría de los festivales de cine, encontró su éxito en el circuito de cine nocturno de medianoche.

La repercusión de ‘Eraserhead’ llevó a que la productora de Mel Brooks lo eligiera para dirigir ‘El hombre elefante’, una película biográfica protagonizada por John Hurt, que fue nominada a ocho premios Oscar y consolidó a Lynch como una figura clave en Hollywood.

A pesar de rechazar la oferta para dirigir ‘El retorno del Jedi’, Lynch aceptó realizar una adaptación de la novela de ciencia ficción ‘Dune’, de Frank Herbert. Aunque la película no cumplió con las expectativas tanto comerciales como críticas, le permitió continuar con su carrera, que culminaría con el estreno de ‘Blue Velvet’, un thriller de cine negro que marcó un hito en el cine de los 80 y le valió una nueva nominación al Oscar.

David Lynch deja un legado indeleble en la historia del cine y la televisión, y su partida deja un vacío que difícilmente podrá ser llenado.

El mundo del cine y la televisión lamenta la pérdida de un creador cuya obra trascendió fronteras, dejando una marca imborrable en la industria.

Fotografías: David Lynch – RR.SS.