El dirigente del club castellonense reclamó mayor "respeto" y manifestó su crítica al hecho de que el VAR no interviniera en dichas acciones.
El presidente del Villarreal, Fernando Roig, expresó su descontento tras el empate ante la Real Sociedad (2-2), en un encuentro marcado por la anulación de tres goles a su equipo.
«Nos merecemos un respeto, el VAR llegó al fútbol para jugadas como la del último gol. Si es una jugada que deja seguir, el VAR la tiene que ver si acaba en gol. Así como la jugada de Ayoze. Creo que el VAR ha llegado para ayudar. Creo que ambas jugadas debían de haberse revisado. El VAR existe para eso», lamentó Roig.
En relación al último gol invalidado por una posible falta del delantero del Villarreal, el presidente consideró que fue «un forcejeo entre uno y otro, es una jugada limpia que acaba en gol». Además, añadió: «Yo considero que ha habido un forcejeo que no es falta. El árbitro ha dejado a seguir, por lo tanto había dudas entre los dos, debía haber ido al VAR».
Sobre el tanto anulado previamente por un presunto fuera de juego de Ayoze, Roig opinó que también debió revisarse con mayor detenimiento: «Si es una jugada posicional, no hay que verla desde lateral, hay que verla de frente y Ayoze no molesta en absoluto al portero. Aquí claramente no distrae nada», afirmó.
Para concluir, hizo un llamamiento a la equidad en la competición y subrayó la importancia de decisiones justas en este tramo de la temporada: «Creo que Villarreal y los equipos que nos estamos jugando tantas cosas, merecemos un respeto. ¿Qué repercusión va a tener esto? Pues mínima. Vamos a seguir luchando contra el Espanyol, no queda otra. Estas declaraciones no son solo para el Villarreal, es para que el nivel suba, no solo para nosotros, es para todos», defendió.