Varios vecinos resultaron heridos y dos bomberos sufrieron afectaciones durante las labores de extinción del incendio y rescate de los residentes.
Un incendio declarado en una vivienda de un edificio en la calle Maestro Ripollés de Castellón, que se extendió a un segundo bloque, ha sido controlado en la tarde de este miércoles, según ha confirmado la alcaldesa de la ciudad, Begoña Carrasco. La rápida intervención de los bomberos y la coordinación entre los servicios de emergencias y las fuerzas de seguridad han permitido evitar una tragedia en este barrio de Grapa de la capital de La Plana.
Se ha producido un milagro.
Ha declarado Carrasco, destacando la eficacia de la respuesta.
El incendio, cuyas causas aún se desconocen, obligó a desalojar la mayoría de las viviendas afectadas por la intensa humareda, mientras que algunos vecinos, con movilidad reducida o de edad avanzada, han sido confinados por indicación de los bomberos, pudiendo salir finalmente por sus propios medios.
La mejor noticia, según Carrasco, es que no hay víctimas mortales ni heridos graves. Los servicios médicos atendieron a cuatro personas: dos por quemaduras leves, una por un ataque de ansiedad y un bombero por un golpe de calor.
En el operativo participaron cuatro dotaciones de bomberos con 18 efectivos, tres ambulancias, agentes de la Policía Local y de la Policía Nacional.
La alcaldesa ha agradecido la colaboración de las autoridades, incluyendo al presidente de la Generalitat, Carlos Mazón; el conseller de Emergencias, Juan Carlos Valderrama; la presidenta de la Diputación, Marta Barrachina; y la subdelegada del Gobierno en Castellón, Antonia García, quienes se pusieron a disposición de la emergencia desde el primer momento. También destacó el trabajo conjunto de los concejales presentes, como Antonio Ortolá (Seguridad y Emergencias), Sergio Toledo (Urbanismo e Infraestructuras), Maica Hurtado (Bienestar Social) y Alberto Vidal (Comercio), así como la delegada del Consell en Castellón, Susana Fabregat, y el propio conseller Valderrama, que se trasladaron al lugar.
El incendio generó una gran columna de humo visible desde varios puntos de la ciudad, lo que provocó una rápida movilización de los servicios de emergencia. La Generalitat Valenciana confirmó la activación del protocolo de emergencias y el apoyo del Consorcio Provincial de Bomberos. Por su parte, la Subdelegación del Gobierno en Castellón informó que la Policía Nacional colaboró en el desalojo y aseguramiento de la zona.
El suceso ha puesto de relieve la importancia de la coordinación interinstitucional en situaciones de emergencia. La alcaldesa subrayó la “perfecta coordinación” entre los distintos cuerpos, un factor clave para minimizar los daños y proteger a la población. Aunque las investigaciones sobre el origen del incendio están en curso, las autoridades han descartado por el momento cualquier hipótesis concreta.
El Ayuntamiento de Castellón ha realojado en hoteles a 10 vecinos que no puedan regresar a sus hogares mientras se evalúan los daños estructurales.
Los bomberos siguen inspeccionando casa por casa para determinar la afección de las viviendas.
Afirmó Carrasco.
El Consistorio ha habilitado líneas de atención para los afectados y mantiene un dispositivo de seguimiento para garantizar la seguridad de los vecinos y facilitar su retorno a los hogares una vez las condiciones lo permitan. La prioridad ahora es evaluar los daños estructurales en los edificios afectados.
La Policía Judicial y la Científica han iniciado una investigación para determinar si una imprudencia en un patio de luces, posiblemente relacionada con unos colchones, pudo ser la causa del incendio declarado este pasado miércoles 16 de abril en un edificio de la calle Maestro Ripollés, en el barrio de Grapa, Castellón.
El incendio, que generó una intensa columna de humo visible desde diversos puntos de la ciudad se propagó con virulencia debido a la combustibilidad del revestimiento exterior del edificio, identificado como tela asfáltica por los vecinos y confirmado por el jefe de bomberos, Antonio Costa.
La combustibilidad de ese material fue uno de los factores clave para que el incendio corriera verticalmente.
Explicó Costa.
Las llamas rompieron ventanas, entraron en varios pisos y alcanzaron la azotea, complicando las labores de extinción. La alcaldesa de Castellón, Begoña Carrasco, calificó de “milagro” que no hubiera víctimas mortales ni heridos graves. En total, se atendieron a cuatro personas: dos vecinos por quemaduras leves, una mujer de 75 años por inhalación de humo y un caso de ansiedad. Además, dos bomberos, de 31 y 39 años, fueron asistidos por inhalación de humo, y otro recibió atención por un golpe de calor. El Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU) confirmó que los heridos fueron estabilizados en el lugar o trasladados a centros de salud cercanos, como el de Fernando el Católico.
Investigación en curso
La Policía Nacional centra su investigación en una posible imprudencia en el patio de luces, donde el fuego pudo originarse por unos colchones, aunque las causas exactas siguen bajo análisis. Las autoridades no descartan otras hipótesis, pero el material inflamable de la fachada, combinado con las condiciones del incendio, ha levantado preocupaciones sobre la seguridad de ciertos revestimientos en edificios residenciales. Este incidente recuerda al trágico incendio de Valencia en febrero de 2024, donde el poliuretano de la fachada contribuyó a la rápida propagación del fuego, causando 10 muertes.
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