Los agentes investigan si Torró fue víctima de una trampa y ya han interrogado a su familia.
La Guardia Civil sigue adelante con la investigación del brutal asesinato de Arturo Torró, exalcalde de Gandía entre 2011 y 2015. Su cadáver fue encontrado sin vida la noche del miércoles 19 de febrero, a la altura del kilómetro 37 de la autovía A-38, en el municipio de Xeresa, Valencia. Torró, de 62 años, presentaba una herida de bala en el pecho, junto con marcas en el cuello que son compatibles con un estrangulamiento. Estos indicios han llevado a las autoridades a sospechar que el crimen fue premeditado .
Fuentes cercanas a la investigación indican que el exalcalde viajaba en su vehículo, un Mercedes, cuando el panel de control le mostró un problema con una de las ruedas, «la cual había sido pinchada intencionadamente». Al detenerse en el arcén para inspeccionar el daño, Torró fue atacado. Los investigadores creen que los agresores lo inmovilizaron utilizando una cuerda o un objeto similar antes de dispararle a quemarropa, lo que sugiere que más de una persona estuvo involucrada en el asesinato.
El vehículo fue hallado con el motor aún encendido, y fue su esposa quien descubrió el cadáver tras acudir al lugar preocupada por la tardanza de su marido, luego de intentar contactarlo sin éxito. Al no recibir respuesta, optó por salir a buscarlo y «consiguió encontrar su ubicación gracias a la geolocalización del dispositivo de su esposo», aunque este detalle aún está siendo confirmado. Finalmente, logró localizarlo en la A-38, cerca de la salida Xeresa-Xeraco, en la comarca de la Safor, en Valencia, y se dirigió hacia allí.
Arturo Torró, conocido empresario y político del Partido Popular, «había denunciado en al menos tres ocasiones ante la Policía Nacional haber recibido amenazas, algunas de ellas de hace algún tiempo». Estas denuncias ahora forman parte de las líneas de investigación, que también están considerando un posible ajuste de cuentas o un móvil económico. Torró atravesaba una delicada situación financiera: en 2023 fue condenado a tres años y medio de prisión por malversación en el caso Tele 7, relacionado con la gestión de la televisión municipal de Gandía. Además, debía al Ayuntamiento cerca de 350.000 euros tras una sentencia del Tribunal de Cuentas.
Cabe recordar que la Sección de Admisión de la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo decidió inadmitir a trámite el recurso de casación presentado por Arturo Torró, a través de su representación legal, contra esta sentencia dictada el 21 de septiembre de 2022 por la Sala de Justicia del Tribunal de Cuentas.
Señalar que dicha sentencia obligaba a Torró a devolver al Ayuntamiento de Gandía la cantidad de 350.000 euros. La justicia consideró que durante su gestión como alcalde de Gandía, se realizaron pagos indebidos e injustificados a la empresa audiovisual Comarques Centrals Audiovisual.
La Guardia Civil, a través de su Unidad Orgánica de Policía Judicial, está analizando las cámaras de tráfico, las antenas de telefonía y la escena del crimen, donde los agentes de Policía Científica han estado buscando evidencias como casquillos o huellas. El Juzgado de Instrucción número 1 de Gandía ha decretado el secreto de sumario, y el cuerpo de Torró fue trasladado al Instituto de Medicina Legal de Valencia para la autopsia, cuyos resultados podrían ayudar a esclarecer si la causa de la muerte fue el disparo o el estrangulamiento.
El Ayuntamiento de Gandía decretó tres días de luto oficial, hasta este sábado 22 de febrero, y convocó un minuto de silencio en memoria del exalcalde. Este crimen ha conmocionado a la comarca de La Safor, donde Torró era una figura conocida tanto por su etapa política como por su trayectoria empresarial, que incluyó la fundación de la cadena de ópticas +Visión. Por el momento, no hay detenidos, y las autoridades mantienen abiertas todas las hipótesis mientras continúan trabajando para identificar a los responsables de este violento crimen.
La reconstrucción de las últimas horas de Arturo Torró
La Guardia Civil trabaja intensamente para reconstruir las horas previas al asesinato de Arturo Torró y así avanzar en la identificación de los sospechosos. Dado que no se dispone de imágenes del momento exacto en la autovía, la reconstrucción de los hechos será clave para entender lo sucedido.
Una de las certezas es que el coche de Torró estaba intacto, tanto por dentro como por fuera, cuando se detuvo en la A-38 debido a una pérdida de presión en las ruedas. El exalcalde estuvo hablando por teléfono con un amigo y le comentó que «un coche había parado detrás de él». Sin embargo, su cuerpo apareció más tarde con signos de estrangulamiento, aunque la causa de su muerte fue un disparo en el pecho.
La Guardia Civil ha reunido pruebas en el lugar del crimen y está revisando las cámaras de seguridad de la zona. Sin embargo, en este tramo de la autovía no existen cámaras, por lo que los investigadores se centran en la reconstrucción de las horas previas al asesinato. Esto incluye la revisión de sus movimientos y la triangulación de las llamadas telefónicas.
Actualmente, los agentes trabajan en varias líneas de investigación abiertas. Una de ellas es que Torró pudo haber caído en una trampa, encontrándose con sus asesinos, y tras un forcejeo, logró huir, pero fue atrapado en plena autopista. También se está investigando a su familia, a quienes ya se les ha tomado declaración. La ciudad de Gandía, donde fue alcalde entre 2011 y 2015, sigue conmocionada, mientras que la familia espera respuestas que aclaren quién o quiénes fueron los responsables del asesinato.
La Guardia Civil considera como la principal hipótesis que el exalcalde fue víctima de un asesinato planificado con antelación. Se sospecha que los agresores pudieron haberlo seguido desde el municipio de la Ribera, donde Torró estuvo durante parte de la tarde, y que, de manera intencionada, le pincharon una rueda para forzarlo a detenerse. Una vez detenido en el arcén de la carretera, «el agresor o los agresores» habrían actuado de forma rápida, estrangulándolo y disparándole en el pecho.
Homicidios solicitará a Mercedes que se realice el volcado del sistema de registro informático del vehículo y está revisando las grabaciones de varias estaciones de servicio. Además, los investigadores han rastreado calles y comercios en busca de cámaras de seguridad que pudieran haber registrado el paso de Torró por Sueca, el municipio del que salió solo 45 minutos antes de su asesinato. Si existen esas grabaciones, podrían ser cruciales para resolver el caso.
El «móvil económico» o «un posible ajuste de cuentas» cobra cada vez más peso, mientras los investigadores siguen buscando a los responsables de este brutal asesinato.