L’Alcora celebra el ‘Sopar de Fartons’ con un nuevo récord de 6,9 kilos

L’Alcora celebra el ‘Sopar de Fartons’ con un nuevo récord de 6,9 kilos

El evento plantea un desafío singular: los participantes se pesan antes de iniciar la comida y, al terminar, el ganador es quien haya incrementado más su peso corporal.

 

La localidad de l’Alcora fue este fin de semana el escenario de una de las celebraciones más singulares del calendario festivo de la comarca: el Sopar de Fartons. Este evento, que llega a su undécima edición, combina tradición, gastronomía y un toque de humor en un encuentro único.

Bajo la organización de San Jorge Events, esta reunión supera los límites de una simple cena para transformarse en un homenaje a las costumbres populares. Más de 100 personas provenientes de lugares como Palencia, Valladolid, Madrid, Sevilla, Huesca o Albacete se dieron cita para disfrutar de una experiencia que destaca por su espíritu de convivencia, buena comida y diversión.

El evento propone un reto peculiar: los participantes deben subirse a una báscula antes de comenzar a comer y, al finalizar, se proclama ganador quien haya aumentado más su peso corporal. Jorge Traver, promotor del evento, enfatizó que el objetivo no es únicamente el desafío gastronómico, sino también disfrutar de un momento inolvidable lleno de risas y camaradería. “Esto es más que una competición; es un homenaje a la buena vida, a compartir una mesa, comida y alegría con los tuyos”, afirmó.

El evento plantea un desafío singular: los participantes se pesan antes de iniciar la comida y, al terminar, el ganador es quien haya incrementado más su peso corporal.

En la categoría masculina, Enrique Gascón logró el título del Puchero de oro tras aumentar su peso en 6,9 kilos. Le siguieron Joan Traver y Víctor García, empatados con 4,7 kilos, y Carlos Rubén, quien alcanzó los 4,2 kilos. Por otro lado, en la categoría femenina, Cristina Liberós, Patricia Gil y Rosana Vidal compartieron el primer lugar al sumar 2,3 kilos cada una. Finalmente, el Puchero de oro fue adjudicado a Cristina tras un sorteo.

En un gesto simbólico, el premio a la menor ganancia de peso, la Cuchara plana, fue otorgado a Alejandro Gronelly.

Un origen cargado de amistad y tradición

La historia de este peculiar evento se remonta a 2014, cuando un grupo de amigos decidió rescatar las antiguas reuniones en una pequeña caseta de campo, conocida como parany. En aquellas reuniones, la gastronomía, la música y los desafíos culinarios eran los protagonistas, creando un ambiente de convivencia y disfrute.

Con el tiempo, el encuentro evolucionó hasta convertirse en un evento anual de gran escala que reúne a participantes y espectadores. Además de la comida, incluye espectáculos como demostraciones de tragafuegos y música en vivo, consolidándose como una cita imprescindible en el calendario de l’Alcora.

El evento plantea un desafío singular: los participantes se pesan antes de iniciar la comida y, al terminar, el ganador es quien haya incrementado más su peso corporal. El evento plantea un desafío singular: los participantes se pesan antes de iniciar la comida y, al terminar, el ganador es quien haya incrementado más su peso corporal. El evento plantea un desafío singular: los participantes se pesan antes de iniciar la comida y, al terminar, el ganador es quien haya incrementado más su peso corporal. El evento plantea un desafío singular: los participantes se pesan antes de iniciar la comida y, al terminar, el ganador es quien haya incrementado más su peso corporal. El evento plantea un desafío singular: los participantes se pesan antes de iniciar la comida y, al terminar, el ganador es quien haya incrementado más su peso corporal. El evento plantea un desafío singular: los participantes se pesan antes de iniciar la comida y, al terminar, el ganador es quien haya incrementado más su peso corporal.