Les Calderes de Almassora aspiran a ser Fiesta de Interés Turístico Autonómico

Les Calderes de Almassora aspiran a ser Fiesta de Interés Turístico Autonómico

En la sesión plenaria también se aprobó la modificación de la plantilla y la relación de puestos de trabajo con la creación de dos plazas de auxiliar de archivos y bibliotecas.

 

El pleno municipal de octubre ha dado luz verde al expediente para solicitar que la fiesta de Les Calderes, que se celebra el 22 de mayo en honor a la patrona Santa Quitèria, sea reconocida como fiesta de interés turístico autonómico. El siguiente paso será enviar la certificación del acuerdo a la Conselleria de Innovación, Industria, Comercio y Turismo para que se considere la propuesta.

La alcaldesa, María Tormo, ha enfatizado que esta celebración es “emblemática para los almassorins”, cargada de simbolismo y un profundo sentimiento de hermandad, ya que cada año reúne a miles de personas en el día de nuestra patrona, a quien profesamos una gran devoción.

Este avance busca potenciar una fiesta que fue declarada fiesta de interés turístico provincial en mayo de 2008. Tormo ha señalado que “las 22 calderas representan la generosidad y solidaridad de los almassorins, así como el espíritu de compartir”.

En julio, la Alcaldía elaboró una memoria justificativa para tramitar la solicitud de reconocimiento de la fiesta de Les Calderes, destacando que esta festividad atrae cada año a un mayor número de visitantes. Se considera un atractivo turístico a nivel autonómico, gracias a su historia y tradición, así como por el intercambio cultural que promueve, beneficiando no solo a la población local y la provincia de Castellón, sino también a toda la Comunitat Valenciana.

El informe cuenta con el respaldo de otros documentos elaborados por la jefatura de la Policía Local, el presidente de la Junta Local de Fiestas, Santiago López, y el concejal de Fiestas, Arturo Soler.

En la festividad local de Santa Quitèria, celebrada el 22 de mayo, se distribuyeron cerca de 8,000 raciones preparadas en 52 calderas, aunque solo 22 de ellas fueron cocinadas en la calle y recibieron la bendición. Este evento es conocido por su plato más emblemático: un arroz seco que se elabora con maestría. Cada caldera contiene 14 kilos de arroz, 14 kilos de pollo, 2.5 kilos de costilla, un litro y medio de aceite, 2.5 kilos de guisantes, tres botes de tomate, ajos y sal.

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Durante la sesión plenaria también se aprobó la modificación de la plantilla y la relación de puestos de trabajo, que incluye la creación de dos plazas de auxiliar de archivos y bibliotecas.