
La investigación descubrió que, una vez sustraídas, las prendas de ropa eran comercializadas de forma ilegal en mercadillos de la provincia de Alicante.
Agentes de la Policía Nacional han detenido a 11 personas en Alicante acusadas de sustraer más de 1.000.000 de euros en prendas de una conocida cadena de moda, según informó la Jefatura en un comunicado.
Algunos de los detenidos trabajaban en la empresa de transporte encargada de distribuir los productos de la marca, aprovechando su puesto para manipular los envíos y robar las prendas.
La investigación comenzó tras una denuncia presentada por los servicios jurídicos de una empresa textil, que alertó sobre el robo de aproximadamente 83.900 artículos de ropa de su firma. La denuncia fue realizada después de que un ex trabajador de la empresa de transporte informara sobre manipulación de cajas en las instalaciones de la empresa de logística ubicada en El Bacarot (Alicante), donde se sustraían grandes cantidades de ropa. Esta empresa era responsable de distribuir los productos desde los almacenes de la marca a las tiendas en centros comerciales de Alicante y Murcia.
El análisis de los investigadores reveló que, tras ser robadas, las prendas de ropa eran vendidas de manera clandestina en mercadillos de la provincia de Alicante.
Las pesquisas permitieron comprobar que las tiendas afectadas coincidían con las que la empresa de transporte había incluido en su listado de destinos. Las tiendas se encontraban en centros comerciales de localidades como Alicante, Elche, Petrer, Orihuela Costa, Murcia, Lorca, Cartagena y San Pedro del Pinatar.
Durante la investigación, se descubrió que las prendas eran vendidas en mercadillos de Alicante, San Juan y Elche, con sus etiquetas originales y a un precio mucho menor que el de venta en tienda. Se trataba de artículos de temporada, que nunca llegaron a las tiendas y fueron desviados del circuito legal de distribución.
A raíz de esta información, se organizó un operativo policial que permitió la intervención de las prendas en diversos mercadillos y la posterior identificación de un almacén en Sueca como punto de venta de la mercancía robada.
Los agentes verificaron que las prendas incautadas en los mercadillos pertenecían a los envíos que nunca llegaron a los comercios de Alicante y Murcia. El encargado del reparto de la empresa de transporte, aparentemente, cargó los productos en su camión y los retuvo, sin entregarlos a los puntos de venta.
La investigación también implicó a los trabajadores de la empresa de reparto, quienes sustraían las prendas con total impunidad mientras realizaban las tareas de distribución. Finalmente, se detuvo a 11 personas: siete por apropiación indebida y hurto continuado, y cuatro por receptación.
Además, se llevó a cabo un registro en el almacén de Sueca, donde se recuperaron más de 1.800 prendas de ropa. Se estima que el valor de lo sustraído supera el millón de euros, con más de 83.900 prendas robadas.