Denuncia que "la plaga de mosquitos que afecta a la Marjaleria y la zona del Raval Universitari vuelve a pillar a Begoña Carrasco sin los deberes hechos".
La concejala socialista Mary Carmen Ribera ha denunciado la inacción del equipo de gobierno del PP y Vox frente a la creciente plaga de mosquitos que afecta a zonas como la Marjaleria y el Raval Universitari de Castelló de la Plana. Según Ribera, “una vez más, Begoña Carrasco no ha hecho los deberes para frenar la aparición de estos insectos”.
Ribera subraya que la ciudadanía vuelve a sufrir las consecuencias del “abandono” por parte del gobierno municipal, al que acusa de ser “incapaz, año tras año, de anticiparse a la proliferación masiva de mosquitos en Castelló”.
La concejala lamenta que la alcaldesa Carrasco “vuelve a quedar en evidencia por su falta de previsión”, ya que “estamos apenas a principios de abril y los mosquitos ya suponen un problema serio en varios puntos de la ciudad”.
Tras un final de invierno y un inicio de primavera marcados por las lluvias, era evidente –para todos menos para el equipo de gobierno– que la presencia de mosquitos iba a dispararse, especialmente ahora con las temperaturas en aumento.
Señala Ribera. “Carrasco, que tanto alarmismo generaba cuando era jefa de la oposición, ahora parece más preocupada por su imagen en redes sociales que por atender las verdaderas necesidades de la ciudadanía”, añade.
Desde el Grupo Municipal Socialista se recuerda que la lucha contra los mosquitos debe mantenerse durante todo el año, y que es fundamental actuar especialmente en momentos en los que se acumula agua y suben las temperaturas. Ribera critica que “un año más, el gobierno municipal ha demostrado su incapacidad para adelantarse a esta situación”.
Ante este escenario, los socialistas han llevado el asunto a la Comisión de Estudio de Ciudadanía, Participación y Seguridad, reclamando un refuerzo inmediato de las campañas de control de mosquitos, ya que “podemos estar ante un problema real de salud pública si no se toman medidas urgentes”, concluye Ribera.