
Tírig celebra la festividad de Santa Quitèria con una jornada de devoción, música, tradición y hermandad vecinal.
Tírig ha vivido un intenso fin de semana marcado por la devoción, la música y la tradición con motivo de las fiestas en honor a su patrona, Santa Quitèria. La jornada festiva comenzó con una solemne misa, seguida de la tradicional procesión por las calles del municipio, en la que numerosos vecinos y vecinas acompañaron la imagen de la santa. La Rondalla y la banda de música de Tírig pusieron el acompañamiento musical a este emotivo recorrido.
Uno de los momentos más esperados por el vecindario fue, como cada año, el tradicional reparto de ‘coquetes’, un dulce típico que se amasa días antes y que congrega a mayores y pequeños en torno a esta entrañable costumbre.
La celebración continuó por la tarde con un concierto tributo a Joan Manuel Serrat. El espectáculo ‘Hoy puede ser un gran día’, con la voz de Sergi Nebot y Juanvi Lladosa al piano, ofreció una cuidada selección de canciones del cantautor catalán, convirtiéndose en la banda sonora perfecta de una jornada marcada por el sentimiento de unidad y hermandad.
Ya por la noche, el ambiente festivo se trasladó al pabellón municipal, donde el grupo Triband animó el baile y una discomóvil organizada por los quintos puso el broche final a un día cargado de música, convivencia y tradición.
El alcalde de Tírig, Juanjo Carreres, quiso poner en valor la implicación del vecindario: “Gracias a la colaboración y el compromiso del pueblo, tradiciones tan nuestras como el reparto de ‘coquetes’ y los actos en honor a Santa Quitèria se mantienen vivos y nos unen en una jornada de hermandad y celebración”.