Este programa beneficiará a medio millón de familias residentes en la Comunitat Valenciana que no superen una renta familiar de 21.000 euros.
Este martes, el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, ha anunciado la iniciativa del bono cesta de la compra para ayudar a las familias valencianas vulnerables. El gobierno autonómico destinará 48 millones de euros para esta iniciativa. El bono es una tarjeta prepago con un valor de 90 euros, que estará activa durante cuatro meses. Se estima que medio millón de valencianos, residentes en la autonomía y con rentas familiares inferiores a 21.000 euros, podrán acceder a ella y canjearla en establecimientos de su elección por productos alimentarios.
El anuncio se hizo durante un acto celebrado en el Palau de la Generalitat, en el que estuvo presente el presidente de la patronal valenciana, Salvador Navarro. Este detalló que las grandes superficies y los comercios agrupados en Confecomerç han previsto facilitar vales de compra y proporcionar alimentos por un importe global de un millón de euros, cuya entrega gestionarán ONG. Al acto también asistieron los secretarios generales de UGT PV y CCOO, así como representantes de distribuidores y pequeños comercios.
Según fuentes de la Conselleria de Hacienda, se ha habilitado una página web informativa sobre la iniciativa del bono cesta de la compra en https: bonocesta.gva.es. A partir del 15/18 de abril se podrán presentar solicitudes y la Agencia Tributaria Valenciana verificará si se cumplen los requisitos. Posteriormente, se comunicará cuándo y dónde se puede recoger la tarjeta prepago, cuyos puntos de distribución aún están por determinar pero estarán disponibles en toda la Comunitat Valenciana. No será necesario activar la tarjeta, ya que se puede utilizar directamente.
La directora general de Coordinación del Diálogo Social, Zulima Pérez, ha explicado que esta iniciativa busca ayudar a las familias ante el aumento de los precios de los productos básicos debido a la guerra en Ucrania, que ha generado un incremento en los costes energéticos y se ha trasladado a la cesta de la compra, incluyendo el precio de los alimentos básicos, sin un aumento equivalente en los salarios.
Pérez ha destacado que hace unos meses la Generalitat implementó el plan Reactiva de respuesta inmediata, cuyas medidas ya están en marcha. Ahora, se ha anunciado el bono cesta de la compra, que demuestra las características de la Comunitat Valenciana de «acuerdo y diálogo» con las partes involucradas.
El presidente de la CEV ha agradecido al pequeño comercio y las grandes distribuidoras el «esfuerzo» de meses de trabajo para contribuir a esta iniciativa. También ha agradecido a los equipos técnicos de la propia patronal, de la Asociación Nacional de Grandes Empresas de la Distribución (Anged), la Asociación de Supermercados de la Comunitat Valenciana (Asucova) y el pequeño comercio representado en Confecomerç.
Navarro ha explicado que en los últimos meses se ha buscado una forma de colaboración y que las grandes superficies, los supermercados y el pequeño comercio han decidido facilitar vales por un valor de un millón de euros. La distribución de los vales será gestionada por ONG y asociaciones sin ánimo de lucro, para garantizar que lleguen a las personas que más lo necesiten.
CAPACIDAD DE AYUDA «LIMITADA»
El presidente de la patronal ha afirmado que están haciendo «todo lo que está en sus manos» y ha señalado que la capacidad de ayuda de las entidades es «limitada» porque también se enfrentan a un importante aumento de costes y «los márgenes se están reduciendo».
Asimismo, ha indicado que el porcentaje de ayuda comprometida «está por encima de los márgenes de estas empresas» y que es la fórmula que permite la ley porque «cualquier otra opción no pasaría el control de la Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia». Por último, ha defendido que esto se suma a que cada distribuidor «ya está haciendo esfuerzos para ofrecer el mejor precio posible respetando la ley de la Cadena Alimentaria y sin perjudicar a la industria o a los productores».
Navarro también ha destacado que esta iniciativa «no es un ejercicio de responsabilidad aislado», ya que «a través de la plataforma Compromiso CEV, estamos ayudando a colectivos más vulnerables, actuando como nexo entre las empresas comprometidas y los colectivos en riesgo de exclusión, y hoy somos el nexo entre los supermercados, el pequeño comercio y las familias que necesitan ayuda en la cesta de la compra». «Es justo reconocer nuestra aportación a la sociedad», ha concluido.
«CONVERSACIONES»
Por su parte, Puig ha señalado que este «punto de llegada» se ha alcanzado tras «muchas conversaciones y diálogo», lo cual es «una seña de identidad de la Comunitat Valenciana» y ha permitido generar una respuesta en la pandemia y en este momento. Entre otras acciones, ha citado el Plan Reactiva, las ayudas en el transporte o la reforma fiscal aprobada por unanimidad en Les Corts, a propuesta del Gobierno, que pretende respaldar a las rentas medias y bajas con más dificultades en un momento inflacionario «con el mejor respaldo posible del conjunto de la sociedad».
Puig ha destacado el «enorme esfuerzo» que supone esta iniciativa para las arcas públicas, por lo que ha agradecido el trabajo del Conseller de Hacienda, Arcadi España, y ha valorado que esto genera «un paso más en la confianza en los valencianos para llegar a acuerdos y generar un escenario positivo para la convivencia, la inversión y la actividad económica».
«Esta iniciativa va al corazón de las economías domésticas, a las neveras, gracias a la cooperación público-privada«, ha expuesto, y ha destacado la «dificultad técnica» que ha supuesto perfilarla, dada la cantidad de actores implicados y para que cualquier persona pueda ir a cualquier comercio de alimentación a gastarla.
COMPATIBLE CON AYUDAS
La iniciativa consiste en una tarjeta bancaria prepago con un saldo de 90 euros, activa durante cuatro meses en la primera edición, desde mediados de abril hasta el 15 de julio, y está dirigida a residentes en la Comunitat Valenciana cuya renta familiar no supere los 21.000 euros, lo que representa a más de medio millón de personas. Esta iniciativa es compatible con el Ingreso Mínimo Vital y la Renta Valenciana de Inclusión y cuenta con la ayuda adicional de 200 euros del Gobierno.
Puig ha destacado que «no puede ser una acción universal, sino que va dirigida a atajar la fractura social en las familias con menos renta». Además, ha señalado que el proceso de solicitud será «sencillo» y se llevará a cabo de manera telemática. También se proporcionará ayuda a través de ONG, Ayuntamientos o asociaciones de consumidores para facilitar el acceso de los usuarios.
«Había dos opciones: ‘sálvese quien pueda’ o multiplicar la acción pública, gestionando para la mayoría de la sociedad. Hemos optado por la segunda opción a través del diálogo», ha indicado el ‘president’, quien ha agradecido el respaldo de la CEV, los sindicatos, las empresas de distribución y el pequeño comercio. Además, ha destacado que esta iniciativa es «una exigencia ética» y que se espera dar más pasos adelante en el futuro para ayudar a las personas en momentos de dificultad.