Presentarán una denuncia por delito de odio contra el individuo, además, se considera que ha cometido una infracción leve por escalar al balcón, otra grave por desobediencia y colocar símbolos franquistas es una infracción, según la Ley de Memoria Democrática.
El hombre que escaló el balcón del Ayuntamiento de Albaida (Valencia) y arrancó y lanzó al suelo dos banderas LGTBI enfrentará medidas legales por parte del ayuntamiento. Previamente, había colocado una bandera franquista en una pared contigua al edificio, junto a las enseñas de la Comunitat Valenciana, España y la Unión Europea.
Compromís per Albaida, el partido político al que pertenece el alcalde Alejandro Quilis, ha anunciado que presentarán una denuncia por delito de odio contra el individuo, quien ya había manifestado previamente sus intenciones en las instalaciones municipales y no se ha retractado de ellas. Además, se considera que ha cometido una infracción leve por escalar al balcón y otra grave por desobediencia, según lo estipulado en la Ley 4/2015.
Los hechos ocurrieron durante la noche del sábado al domingo, y la Policía Local logró identificar al autor, según confirmó la delegada del Gobierno, Pilar Bernabé. Un vídeo difundido por la coalición muestra cómo el hombre trepa por la fachada del Ayuntamiento y arranca dos banderas del colectivo LGTBI que estaban colgadas en el balcón, coincidiendo con la semana del Orgullo.
Compromís también ha compartido una fotografía previa en la que se puede observar una bandera franquista colgada junto al balcón del ayuntamiento, junto a los mástiles de las banderas oficiales.
Ante estos sucesos, el colectivo LGTBI La Vall Diversa ha convocado una concentración en la plaza mayor del municipio el miércoles a las 20:00 horas. En redes sociales, han señalado,
Hoy Albaida, por culpa del fascismo, es conocida como la ciudad que arranca las banderas de la libertad del balcón del Ayuntamiento y cuelga banderas preconstitucionales fascistas.
El alcalde, en declaraciones a la cadena SER, ha afirmado que el autor ya había manifestado sus intenciones previamente y que «tenía fobia a ese colectivo, por lo que es un delito de odio como una catedral». Además, aseguró que se repondrán las banderas y resaltó que en los 12 años de gobierno progresista no había ocurrido nada similar, siendo condenado este incidente de forma unánime.
La concejala de Bienestar Social e Igualdad, Maria Ángeles Salom, ha afirmado,
Este acto no quedará impune de ninguna manera.
Según ha mencionado, la Policía Local recibió al individuo responsable de arrancar las banderas, quien entregó una de ellas a la concejala. Salom expresó su tristeza al ver la bandera rota y planteó,
La posibilidad de exhibirla para crear conciencia o reemplazarla por una nueva durante toda la semana para reivindicar los derechos de todas las personas, seamos como seamos.
«UNOS SEÑALAN, OTROS EJECUTAN»
«Funciona así el odio, mientras unos señalan desde parlamentos y medios, otros ejecutan», denunció la coalición valencianista en su cuenta de Twitter. Además, recordaron que quitar banderas LGTBI constituye un delito de odio y colocar símbolos franquistas es una infracción según la Ley de Memoria Democrática.
Representantes de Compromís, como su coportavoz Àgueda Micó, se unieron para condenar los hechos y mostrar su apoyo a Albaida, afirmando que no permitirán «ni un solo paso atrás». La rama juvenil de la coalición, Joves PV, destacó en la misma red social,
¡Por nuestros derechos, contra el fascismo!.
BERNABÉ: «ESTA COMUNIDAD MERECE MUCHO MÁS»
Por otro lado, la delegada del Gobierno confirmó el lunes que la Policía Local de Albaida había identificado al hombre que retiró las banderas y que actualmente la Guardia Civil está llevando a cabo una investigación al respecto.
Aunque la investigación aún está en curso y no puede comentar sobre la afiliación política del presunto autor, Bernabé (PSPV) relacionó lo ocurrido,
Con un momento en el que la Comunitat Valenciana está en las portadas de los diarios nacionales e incluso internacionales por quitar banderas y retroceder en derechos.
En referencia al pacto de gobierno entre Vox y PP en Nàquera (Valencia).
Según Bernabé, esto implica «destacar una situación totalmente xenófoba como quitar banderas sin saber muy bien por qué», así como «mostrar una actitud negativa hacia el colectivo LGTBI y generar situaciones de confrontación y crispación».
«Alguien ha decidido que se siente cómodo en estos términos», señaló la delegada en respuesta a preguntas de los periodistas, antes de visitar la comisaría provincial de Valencia.
Por el contrario, reivindicó que «sin lugar a dudas, esta comunidad y este país merecen mucho más»,
Debemos alejarnos de este clima de confrontación y odio que solo conduce a retrocesos.
Concluye.