¿Tercera, cuarta dosis?
Marco Cavalieri, alto responsable de EMA (Agencia Europea del Medicamento) ha manifestado públicamente su temor a sobresaturar el sistema inmune con repetidas vacunaciones y descarta la inoculación de una cuarta e incluso de una tercera dosis. Hace apenas un mes decía todo lo contrario, pero a la vista de la disminución alarmante de la protección ante el virus están dando marcha atrás.
Todo este cambio paulatino de orientación sobre el Covid19 y sus mal llamadas vacunas tiene mucho que ver con el programa de César Vidal y Lorenzo Ramírez titulado «El Gran Reseteo», que recomiendo lo visionen y que les aportará información arteramente oculta por los medios de desinformación.
En dicho programa hablan sobre el informe que el marine Joseph Murphy, ha realizado para el DARPA (Agencia de Proyectos de Investigación Avanzados de Defensa) del Ministerio de Defensa de USA. Dicho informe ha servido para que este organismo se borre del mismo, ante las evidencias graves que se han descubierto.
En 2014, el presidente Obama legisló que los trabajos de ganancia de función, relativos a la búsqueda de posibles nuevas enfermedades se realizaran dentro del territorio norteamericano. Por esa razón, los que estaban implicados en esos trabajos como la ONG Ecohealth Alliance, el Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades Infecciosas, el famoso Anthony Fauci, distintas universidades, la ONU, la OMS y las archiconocidas Pfizer y Moderna, entre otras, trasladaron sus trabajos al Instituto de Virología de Wuhan.
Desde ese momento, tuvieron las manos libres para proceder con sus oscuros trabajos de investigación, ayudados por la complicidad de todos los llamados «verificadores» de noticias, todos ellos convenientemente regados por la «Open Society» del inefable George Soros, que han perseguido cual cazadores de brujas a todos los que se salían del discurso oficial.
Para no cansarles más, aunque en los enlaces que tienen aquí podrán informarse adecuadamente. El virus no es el causante de la terrible pandemia, de forma directa, ya que se trabajó sobre la espiga que se consiguió tuviera la propiedad de abrir la puerta de entrada al virus en las células humanas.
Asimismo, ya se sabía, de inicio, que los medicamentos de ARNmensajero no tenían la eficacia de una vacuna, pero el negocio ya estaba montado y muy bien montado. Curiosamente nadie ha hablado, para nada de los posibles tratamientos contra la enfermedad, ¿acaso son menos rentables que las supuestas vacunas?
https://www-projectveritas-com.translate.goog/?_x_tr_sl=en&_x_tr_tl=es&_x_tr_hl=es&_x_tr_pto=sc
https://cesarvidal.com/la-voz/editorial/editorial-quien-cuando-y-como-creo-el-coronavirus-17-01-22