El Ayuntamiento de Albocàsser entregó un bocadillo y una botella de agua a todas las personas que subieron caminando hasta la ermita.
Albocàsser y los pueblos vecinos disfrutaron este domingo de la romería en honor a Sant Miquel, un evento multitudinario marcado por las altas temperaturas y la elevada participación.
La alcaldesa, Isabel Albalat, agradeció a los mayorales de la calle San Miguel y de las masías cercanas a la ermita su colaboración en la gestión de actividades como la limpieza de la ermita, la preparación de la ‘pastà de la prima’, la colocación de flores silvestres y la administración del servicio de bar en el porche renovado de la ermita, cuyas ganancias se invierten cada año en la conservación del patrimonio.
El Ayuntamiento de Albocàsser entregó un bocadillo y una botella de agua a todas las personas que subieron caminando en procesión hasta la ermita, un acto multitudinario que demuestra la vitalidad de esta tradición. En este sentido, la alcaldesa destacó el buen resultado de la ayuda prestada.
Para completar la mañana, la comida popular se trasladó al pabellón debido a la posibilidad de lluvia y a la falta de personal municipal, donde actuó la rondalla Agrupació Folklòrica Ronda de Llucena. La primera edil lamentó el bloqueo de la Generalitat Valenciana a las nuevas subvenciones para ampliar la plantilla del consistorio, lo que ha provocado que los anteriores contratos hayan finalizado sin posibilidad de reemplazo.
A pesar de este contratiempo, Albalat se mostró satisfecha por la participación del público y el desarrollo de todos los actos previstos. “Fue un día muy completo, con mucha gente disfrutando de la paella monumental que compartieron durante la jornada de la romería y en el pabellón”, indicó la alcaldesa.