Facsa refuerza el servicio en zona urbana y playa ante la llegada del calor
El Ayuntamiento de Almassora y la empresa concesionaria del servicio de alcantarillado y agua potable, Facsa, han reforzado estos días los trabajos de desinsectación y desratización en diversos puntos del casco urbano. Las tareas complementan a las que tanto la firma como el consistorio desarrollan desde el pasado mes de abril en otros puntos del municipio para prevenir posibles plagas de cara este verano.
En concreto, estos días el personal de Facsa trabaja en las calles San Fernando, San Enrique, Constitución Española, San Salvador, Trinidad, San Jaime y la avenida Castellón, en el casco urbano, así como en la calle La Sénia y el camino Catalans en la zona de costa para garantizar la efectividad del tratamiento en ambos espacios.
El concejal de Servicios Públicos de Almassora, Joan Antoni Trenco, acompañado por la responsable de explotación de Facsa en el municipio, Patricia Agrasar, ha visitado la zona para comprobar la evolución de las tareas, que se desarrollan de manera conjunta desde hace cinco años tanto para evitar la proliferación de roedores e insectos como para garantizar la adecuada conservación de las instalaciones.
Los trabajos se suman a la reciente sustitución del colector de aguas residuales de la calle Boqueras de Almassora. Una inspección con cámara de televisión en el interior del recinto detectó el deterioro de la instalación a consecuencia de su antigüedad, por lo que la firma encargó la sustitución para garantizar el servicio al entorno del grupo Corell y las inmediaciones de este vial.
En este caso, la actuación ha afectado a 44 metros de conducción de hormigón de 400 milímetros muy envejecida por el paso del tiempo. Cabe recordar que el colector en este tramo discurre por la acera a una profundidad de metro y medio. De no ejecutarse la sustitución, el entorno de la calle Boqueras, entre Nueve de Octubre y la calle Viver, podría sufrir problemas en la gestión de aguas residuales.
La actuación del antiguo colector por un tramo de polietileno corrugado SN-8 de 400 milímetros asegurará el funcionamiento del colector de aguas residuales entre los pozos de saneamiento y, por tanto, el servicio en un entorno con alta densidad de población.
