Ana Vega (VOX) critica que la reunión de portavoces de esta mañana parecía un encuentro pactado de antemano entre Cs y PSPV.

Ana Vega (VOX) critica que la reunión de portavoces de esta mañana parecía un encuentro pactado de antemano entre Cs y PSPV.

• Se pretende dar una falsa imagen de unidad para blanquear la mala gestión del Botanic

  • Se vuelve a culpabilizar de los contagios a los profesionales de la sanidad y se impone la Ley del Silencio
  • Se pretende que los empresarios de ocio sean los que controlen quiénes tienen el virus y quiénes no

 

 Portavoz del Grupo Parlamentario VOX en las Cortes Valencianas ha lamentado la reunión de esta mañana de los portavoces de los grupos parlamentarios porque «parecía una reunión pactada de antemano por Cs Y PSPV. Ha sido una reunión para blanquear la mala gestión de la crisis”.

Vega se ha quejado de que «Se pretende dar una imagen de que todo lo que se decida en estas reuniones se haga como grupo cerrado, pero de cara a la opinión pública demos una imagen de unidad, de mensaje de que `todo está bien´, `mantener las apariencias´, pero no se puede querer normalizar lo que no es normal”.

Otro de los aspectos en los que VOX no está de acuerdo «es que ahora se eche la culpa de los contagios a los profesionales de la sanidad. Eso no es verdad. Lamentamos que primero se les tratara como héroes y ahora se les culpabilice. Es una grave irresponsabilidad hacer ese tipo de acusaciones y es lo que está haciendo el PSPV. Menos aplausos y más reconocerles la extraordinaria labor que hacen con medios precarios”.

En cuanto al turismo, concretamente a los locales de ocio, se pretende que sean los empresarios los que controlen a la entrada quiénes tienen coronavirus y quiénes no, que haya una corresponsabilidad. Y esa no es labor de los empresarios “es imposible que hagan un seguimiento de quién entra contagiado y quién sano. Nuestra responsabilidad es facilitar la recuperación económica y ayudar a los empresarios y autónomos a que reactiven sus empresas”. Así no se apoya a los autónomos y a nuestros pequeños empresarios que están atravesando por una de las peores crisis económicas. De hecho muchos de ellos se están viendo obligados a cerrar sus negocios, lamentablemente el 30% de ellos no volverán a levantar sus persianas. El Gobierno, en lugar de ayudarlos, les genera más preocupaciones y responsabilidades.