Puig recrimina al Gobierno que "desee romper unilateralmente" lo acordado en el Consejo del Agua: "No se puede comprender".
La Abogacía General de la Generalitat Valenciana ha elaborado, a solicitud del Consell, un informe que sirve como base jurídica para instar al Gobierno a respetar el proyecto de real decreto «en exactamente los mismos términos en los fue aprobado» por el Consejo Nacional del Agua, el pasado veintinueve de noviembre, y que «garantizan la continuidad del trasvase Tajo-Segura«.
Así, el documento apunta que «no hay ninguna justificación jurídica ni técnica» para cambiar los criterios acordados en el Consejo del Agua y, por ende, asegura que «no es preciso acrecentar los caudales ecológicos a su paso por Aranjuez, lo que garantizará la llegada del agua procedente del Tajo hasta la cuenca del Segura«.
El informe de la Abogacía de la Generalitat «desmonta los razonamientos» esgrimidos para intentar justificar un cambio de última hora con relación a los criterios para fijar los caudales ecológicos, en los que el secretario de Estado de Medio Ambiente, Hugo Morán, apela a una serie de sentencias del Tribunal Supremo sobre el particular, conforme ha indicado la Generalitat en un comunicado.
En este sentido, la Abogacía de la Generalitat ha llevado a cabo un «detallado análisis» de la doctrina emitida por el Alto Tribunal y ha concluido que «en ningún instante el Supremo se pronuncia sobre el incremento de los caudales ecológicos, sino solamente apunta que hay que fijarlos».
Es más, señala que en el momento de establecerlos hay que tener en consideración una serie de variables, no solo ecológicas, sino más bien socieconómicas y que la fijación de esos caudales no puede efectuarse de forma indiciaria y sin la debida justificación.
Apunta el documento.
El informe asegura que estos son los principios en los que se fundamenta la disposición novena del proyecto de real decreto, cuyo mantenimiento, ha lamentado la Generalitat, cuestiona ahora el Gobierno. Así, esa disposición establece que, «si con las medidas aplicadas se cumplen los objetivos ambientales fijados para esas masas de agua, no va a ser preciso aplicar los escalones previstos en el plan hidrológico desde el 1 de enero de dos mil veintiséis».
O sea, apostilla el documento de la Abogacía,
No va a ser preciso acrecentar los caudales ecológicos a su paso por Aranjuez, lo que garantizará la llegada del agua procedente del Tajo hasta la cuenca del Segura.
Por todo ello, el Consell comprende que «no existe, tal y como acredita el informe de la Abogacía, ninguna justificación jurídica ni técnica para alterar en el último instante un texto que fue aprobado por extensa mayoría en el Consejo Nacional del Agua».
«NO SE PUEDE ENTENDER»
Tras conocer las conclusiones del informe de la Abogacía, el ‘president’ de la Generalitat, Ximo Puig, ha defendido, en declaraciones remitidas a los medios,
La Generalitat ha actuado siempre y en todo momento de buena fe por el hecho de que desde la confrontación y la guerra no va a llegar agua a Alicante.
Por lo que, el ‘president’, además ha reprochado que «no se puede comprender» que aquello que «se acordó legítimamente» ahora «se quiera romper unilateralmente».
«La Generalitat no está preparada en ningún caso a pasar por esta situación», ha afirmado, y ha subrayado que el documento «refrenda claramente que no hay motivo ni ninguna virtualidad que haga razonable un cambio de situación con respecto a aquello que se acordó legítimamente en el Consejo del Agua«.
«El diálogo es la vía para lograr un éxito que es nada más y nada menos que aquello que es imprescindible: que el trasvase Tajo-Segura sigue actual, mas que al tiempo prosiga avanzándose en la capacidad de tener todos y cada uno de los recursos libres para tener agua por siempre».
CAMBIO DEL SENTIDO DEL VOTO
Exactamente, los representantes del Consell que asistieron a la asamblea del Consejo del Agua, la consellera de Agricultura, Isaura Navarro, y el secretario autonómico de Transición Ecológica, Francisco Candela, han elaborado un informe explicativo en el que afirman,
Cambiarán el sentido de su voto sobre el plan del Tajo si por último se realizase una modificación de lo pactado.
Concretamente, aseveran que su abstención sobre el plan de cuenca del Tajo «estaba condicionada al cumplimiento expreso» de la disposición sobre los ya mencionados criterios para determinar los caudales ecológicos, mas señalan que si ahora se eliminase esa disposición los votos el Consell pasarían a ser negativos, tanto en el caso del plan de Tajo como en el del real decreto.
Siendo así las cosas, y en este punto, el Consell repite «de forma definitiva» su solicitud al Gobierno de España a fin de que se cumpla lo aprobado en la última asamblea del Consejo Nacional del Agua,
Por el hecho de que ese pacto garantiza el mantenimiento del trasvase Tajo-Segura que, para la Generalitat, es una cuestión prioritaria e irrenunciable.
Han concluido.