AVA-ASAJA y ASOPROA recomiendan a los productores a interponer denuncias y a hacérselas llegar para reclamar más vigilancia en los huertos y puntos de venta. Un agricultor de Benifaió sufre tres robos en las últimas cuatro semanas que supone la pérdida de 8.000 kilos de aguacates, más de la mitad de su producción potencial.
La Asociación Valenciana de Agricultores (AVA-ASAJA) y la Asociación de Productores de Aguacate (ASOPROA) advierten de que los ladrones ya han empezado a cometer los primeros robos significativos de aguacates a pesar de que la variedad mayoritaria en el campo valenciano –Lamb Hass– aún necesita cuatro meses más de tiempo en el árbol para alcanzar el grado óptimo de maduración.
Ambas asociaciones denuncian que los robos, alentados por los elevados precios del aguacate, se han convertido en la principal amenaza para el crecimiento de este cultivo subtropical porque, por un lado, arruinan a los agricultores al perder parcial o totalmente la cosecha comercializada y, por otro lado, perjudican a la larga la demanda al frustrar las expectativas de sabor de los consumidores, pues un aguacate inmaduro sabe a corcho o madera.
El presidente de ASOPROA, Celestino Recatalá, reclama “más vigilancia tanto en las explotaciones como en los puntos de venta, ya que los aguacates sustraídos suelen acabar en mercadillos y fruterías locales sin demostrar la debida trazabilidad. Si no conseguimos atajar la inseguridad, podemos perder el cultivo que mejores perspectivas comerciales presenta, siendo como es un superalimento con unas propiedades saludables magníficas que aquí cultivamos siguiendo las máximas garantías de sostenibilidad medioambiental”.
