La portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, insiste en que la solución al problema que supone el sistema recaudatorio a través de cámaras de acceso al centro y que ha creado el gobierno municipal de Amparo Marco, se resolvería renunciando a éste. “Retrasar su puesta en marcha es una excusa para ganar tiempo, porque el 10 de enero volverán las multas, algo que no ayuda a salir de la crisis”
“Si lo que se pretende es controlar la afluencia de vehículos al centro, los bolardos ya cumplen con esa función. El sistema recaudatorio y abusivo de las cámaras no va a suponer mejoras, sino más trabas a quienes tratan de recuperarse de las pérdidas de un año y medio de pandemia. Más de 16.400 multas y 3,2 millones en sanciones, fue el resultado de los dos meses que estuvieron funcionando las cámaras”, añade.
La portavoz del Partido Popular en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, asegura que la solución al problema que supone el sistema recaudatorio a través de cámaras de acceso de vehículos al centro se resolvería renunciando a éste, “de manera definitiva”. “Retrasar su puesta en marcha es una excusa para ganar tiempo, porque el 10 de enero volverán las multas, algo que no ayuda a salir de la crisis. ”, explica.
Y añade: “Si lo que se pretende es controlar la afluencia de vehículos al centro, los bolardos ya cumplen con esa función. El sistema recaudatorio y abusivo de las cámaras no va a suponer mejoras, sino más trabas a quienes tratan de recuperarse de las pérdidas de un año y medio de pandemia. Más de 16.400 multas y 3,2 millones en sanciones, fue el resultado de los dos meses que estuvieron funcionando las cámaras”, añade.
Carrasco apunta que con cada retraso de fecha para que vuelvan a multar las cámaras, “nos están dando la razón”. “Dijimos desde el primer momento que la solución era renunciar definitivamente a las cámaras y presentamos una moción en marzo para que así fuera, que por supuesto nos votaron en contra. Igual que pedimos una rebaja de impuestos porque no es momento de esquilmar el bolsillo de los castellonenses, como se está haciendo con la luz, el gas, la gasolina o la vuelta al pago de peajes, pedimos el apagado definitivo de las cámaras, no es el momento de volver a activar un sistema meramente recaudatorio”, señala.
”Si la alcaldesa está de verdad por la recuperación económica, por ayudar a salir de la crisis a las pymes y autónomos que siguen afectados por la pandemia, lo que tiene que hacer es anunciar ya el apagado de las cámaras definitivo y ayudar al comercio local de nuestra ciudad para evitar que el centro se muera, para que dejen de haber cada vez más locales vacíos y vuelva a recuperar el dinamismo propio de una gran capital como la nuestra”.
Desde el Partido Popular de la ciudad de Castellón, la portavoz Begoña Carrasco y las concejalas María España y Susana Fabregat no han dejado de reunirse con comerciantes, hosteleros y otras empresas de servicios, especialmente afectados por las cámaras. “Lo que necesitan en estos momentos en los que tratan de recuperarse de las pérdidas son ayudas y políticas que atraigan clientes al centro, no que los ahuyenten, como hacen las cámaras”, afirma Carrasco.
Carrasco recuerda que dese el inicio de la pandemia desde el Partido Popular de la ciudad de Castellón no han dejado de hacer propuestas para ayudar al tejido comercial local y a la revitalización del centro. “Propusimos una partida de un millón de euros para la puesta en marcha de ayudas directas al alquiler para comercios, pymes y autónomos, con el fin de facilitar la recuperación económica de la ciudad en plena pandemia y evitar el cierre de nuevos negocios, dada la complicada situación por la que atraviesa el sector”, recuerda.
Además, para dinamizar las compras en los comercios de barrio, el PP propuso 250.000 euros para crear un sistema de bonos comerciales o cheques descuento, que se pudieran utilizar en todos los establecimientos adheridos e incluyeran descuentos de hasta 20 euros por cada compra superior a 40 euros.
También abogamos por por “un Plan de Acción comercial con tickets de parking para facilitar el acceso al centro de la ciudad o la puesta en marcha de una campaña de promoción de productos de proximidad para fomentar el consumo local. Y actuaciones para poner en valor tres infraestructuras comerciales de primer orden de la ciudad, como son el Mercado Central, cuyo plan de mejora fue anunciado justo antes de las elecciones por la propia alcaldesa Amparo Marco y del que nunca más se ha vuelto a saber; el Mercado de Abastos, que necesita mejoras urgentes dada la situación de abandono en que se encuentra; y el Mercado de San Antonio, que necesita de manera urgente un plan de dinamización”, enumera Carrasco.
“El comercio es uno de los principales pilares de la economía de nuestra ciudad y ayudar a reactivar las ventas y a dinamizar el sector, especialmente en una situación como la actual, marcada por la pandemia, debemos sumar esfuerzos y arbitrar medidas que permitan contribuir al progreso de la ciudad y a la recuperación de su tejido económico y comercial”, ha concluido Carrasco.