La Brigada de Benicarló ha retirado la última de las placas con simbología fascista que quedaba en la localidad.
Ha sido Compromís quien ha solicitado a los gobiernos de numerosas ciudades la necesidad de retirarlas y, según exponen desde la formación política, cumplir con la ley y con la normativa vigente en materia de memoria histórica.
Fruto de la iniciativa de Carles Mulet, que se puede consultar en la web de Compromís en el Senado, se han retirado ya entre 3.000 y 4.000 placas, inscripciones y otras expresiones de apoyo al golpe de Estado de calles, plazas o títulos honoríficos.