Bodegas, viñedos, olivos milenarios, algarrobos monumentales o casas peligran ante la construcción de la megaplanta fotovoltaica en Les Useres (Castellón)

Bodegas, viñedos, olivos milenarios, algarrobos monumentales o casas peligran ante la construcción de la megaplanta fotovoltaica en Les Useres (Castellón)

El proyecto, PSF Valentía FV19, requerirá la ocupación de numerosas fincas en Les Useres y su línea de evacuación deberá llegar hasta la subestación de Betxí, atravesando los términos municipales de Vilafamés, Costur, l’Alcora, Onda y Betxí.

 

Los habitantes de Les Useres, en la provincia de Castellón, se oponen al proyecto de Enerhi de construir una megaplanta fotovoltaica en su municipio. El proyecto afectaría a 320 parcelas, donde los residentes afirman que se encuentran viñedos, cultivos ecológicos, olivos y algarrobos monumentales, así como 50 casas de residencia principal.

El informe de impacto ambiental de la empresa, publicado por la Delegación del Gobierno en la Comunidad Valenciana, indica que se instalarán 380.000 placas solares en una superficie de 351 hectáreas. Los propietarios de las parcelas están preocupados porque consideran que la zona es un área trabajada con distintos tipos de negocios, como el agrícola o turístico.

La España despoblada está en el punto de mira de un proyecto que está generando una gran preocupación entre los habitantes de Les Useres.

Alba Saura, propietaria de una de las parcelas de cultivo de la zona, asegura que el área donde se planea construir la planta es la principal zona de producción del municipio. Saura y otros 300 afectados han formado un grupo para intercambiar información y estudiar medidas a tomar para oponerse al proyecto, al que califican de «barbaridad absoluta«.

El proyecto, PSF Valentía FV19, requerirá la ocupación de numerosas fincas en Les Useres y su línea de evacuación deberá llegar hasta la subestación de Betxí, atravesando los términos municipales de Vilafamés, Costur, l’Alcora, Onda y Betxí. El informe de impacto ambiental ha sido presentado para su evaluación y se encuentra en fase de información pública y consultas a los organismos previa a la aprobación de la Declaración de Impacto Ambiental.

La megaplanta fotovoltaica proyectada por la empresa Enerhi en Les Useres abarcará una superficie de 351,9 hectáreas, lo que equivale a casi 500 campos de fútbol. La zona afectada por el proyecto incluye masías, bodegas y viñas turísticas, lo que ha generado gran preocupación entre los habitantes del municipio.

El Ayuntamiento de Les Useres ha tomado medidas para oponerse al proyecto, contratando servicios jurídicos para presentar alegaciones en contra de la instalación de la megaplanta fotovoltaica en la zona.

En la provincia de Castellón, el número de megaplantas solares sigue en aumento. Además de la oposición al futuro parque solar Magda en les Coves de Vinromà y a la nueva autopista eléctrica MAT entre Morella y Almassora, ahora surge un nuevo megaproyecto fotovoltaico en el pequeño municipio de Les Useres, que tampoco cuenta con el apoyo de la población debido a su tamaño y ubicación.

El alcalde de Les Useres, Jaime Martínez, califica la planta solar Valentia FV19 y su red de evacuación aérea de más de 42 kilómetros de distribución como «una barbaridad». Se espera que se necesiten alrededor de 150 torres eléctricas para atravesar el territorio desde el parque hasta el término municipal de Betxí. Un largo camino a través de la provincia con el objetivo de verter la energía producida a la red para su comercialización.

Relacionados  Programación de la X edición de la 'Fira del Vi' de Les Useres

Los números de las instalaciones promovidas por la empresa Harbour Maestrat, perteneciente al grupo empresarial Enerhi (con sede en Sevilla) especializado en la gestión de energías renovables, resultan abrumadores. Pero la preocupación del municipio se centra en que esta megaplanta fotovoltaica de 351,9 hectáreas de superficie (más grande que Magda) se construirá sobre «una de las zonas más habitadas y con mayor actividad de Les Useres», según especifica el alcalde.

El alcalde destaca que la zona elegida para la instalación de los más de 300.000 módulos solares que conformarán la megaplanta actualmente está ocupada por más de medio centenar de masías habitadas todo el año, restaurantes y otros negocios familiares, como viñas turísticas y bodegas.

Para evitar que el proyecto, con una potencia de 136,59 MWp, avance administrativamente y se declare de utilidad pública (lo que podría llevar a la expropiación de propiedades), el Ayuntamiento de Les Useres ha contratado servicios jurídicos y técnicos urbanísticos para presentar alegaciones al estudio de impacto ambiental y solicitar la autorización administrativa previa. La promotora ha registrado ambos documentos en el Ministerio para la Transición Ecológica sin haber mantenido un diálogo previo con el Ayuntamiento ni con los propietarios, según critica el alcalde.

El alcalde Martínez expresa su opinión:

No estamos en contra de la construcción de parques solares, pero no entendemos por qué deben crearse a expensas de destruir nuestro pueblo.

Subraya que este es un obstáculo más en la carrera de fondo que supone la despoblación del mundo rural.

El alcalde considera que tendría más sentido ubicar la planta solar, cuyo coste estimado supera los 88 millones de euros, más cerca del centro de seccionamiento de Betxí, que es el punto final del recorrido eléctrico.

Así también se ahorrarían en toda la línea de distribución.

Según el proyecto, la energía generada por Valentia FV19 desembocará en el centro de seccionamiento de Betxí, después de atravesar los términos municipales de Les Useres, Vilafamés, Costur, l’Alcora, Onda y Betxí.

El alcalde finalmente ha incidido,

Este proyecto es una barbaridad que no tiene en cuenta la preservación del territorio ni la protección del patrimonio, y que afectará negativamente a la actividad económica local, incluyendo explotaciones agrícolas de cultivos como el almendro, olivo y vid, producción vinícola local, explotaciones ganaderas, establecimientos de turismo rural y servicios turísticos, y negocios de hostelería. También pone en riesgo la flora y fauna local, y favorecerá el despoblamiento de la zona y la disminución de la actividad económica, afectando a muchas familias.

Ha concluido.