Se han dispuesto espacios de refugio para los ciudadanos, como la Llar Fallera, la Escola de la Mar y el Pabellón de la Bosca.
El Ayuntamiento de Burriana ha puesto en marcha el Centro de Coordinación Operativo Municipal (CECOPAL) con el objetivo de implementar un plan de acción ante el nuevo episodio de lluvias intensas que se prevé para la localidad. La prioridad es reducir los riesgos de inundaciones y garantizar la seguridad de los ciudadanos. Entre las medidas adoptadas se incluyen la finalización de las obras de los tornillos de Arquímedes en la zona de la Serratella, destinados a facilitar la evacuación de agua acumulada en la costa.
En la reunión del CECOPAL, presidida por el alcalde de Burriana y director del plan de emergencias, Jorge Monferrer Daudí, estuvieron presentes el concejal de Vía Pública, Mario Trullen, la concejal de Comunicación, Paloma Boix, el intendente de la Policía Local, Raúl Amat, el responsable de servicios de Vía Pública y el ingeniero municipal. Durante el encuentro, se analizaron las condiciones actuales de los pantanos, que se encuentran casi a su máxima capacidad, lo que eleva el riesgo de desbordamiento con nuevas precipitaciones.
Se han definido tres zonas de especial vigilancia ante posibles incidentes: el Río Anna, el Marjalet y el Barranco de Betxí, áreas especialmente vulnerables a desbordamientos. Además, se han revisado y despejado las golas de salida al mar para garantizar un adecuado flujo de agua y evitar obstrucciones.
A pesar de que el nivel de alerta para Burriana es bajo (alerta amarilla), el Ayuntamiento ha reforzado la señalización en los caminos y habilitado áreas de evacuación, como el polígono industrial de Carabona, que, por su elevación y amplitud, servirá como un aparcamiento seguro para vehículos. También se han dispuesto espacios de refugio para los ciudadanos, como la Llar Fallera, la Escola de la Mar y el Pabellón de la Bosca.
En cuanto a la instalación de los Tornillos de Arquímedes en la Serratella, una medida clave para la gestión del agua, su puesta en marcha se ha acelerado para estar operativos de manera provisional en caso de emergencia. Estas dos estructuras, con un peso total de 40 toneladas, permitirán elevar el agua 2,20 metros para salvar el mar, evacuando hasta 2.900 litros por segundo. Su objetivo es aliviar los problemas de inundaciones en la zona durante episodios de lluvias intensas y oleaje fuerte, recuperando el sistema de drenaje al mar entre el Camí Ballester y la Coixa, donde hace décadas se cerraron las golas que vertían el agua al Mediterráneo.
El alcalde Jorge Monferrer Daudí ha destacado que «la previsión es fundamental para proteger Burriana frente a episodios de lluvias intensas. La activación del CECOPAL y la instalación de los tornillos de Arquímedes en la Serratella buscan reducir al máximo el riesgo de inundaciones». Asimismo, añadió que «con esta infraestructura, estamos aumentando nuestra capacidad de evacuar agua rápidamente, anticipándonos a posibles emergencias».