La portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, señala que la deuda de la Generalitat Valenciana con los vecinos de la capital de la Plana, de 2,32 millones de euros, se concentra en el Fondo de Cooperación Municipal y en los Servicios Sociales, precisamente las dos que dependen directamente de las funciones del presidente y vicepresidenta de la Generalitat.
“Las dos personas que más pregonan que trabajan por los ciudadanos de la provincia y del conjunto de la Comunidad Valenciana son en realidad los que más olvidadas las tienen, puesto que no están cumpliendo con sus obligaciones ni las promesas”, afirma.
La portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, desvela que Ximo Puig y Mónica Oltra “son los más morosos con los castellonenses”, ya que concentran el grueso de la deuda que la Generalitat Valenciana mantiene con el consistorio, y que asciende a día de hoy a 2.325.062,46 de euros. Así se pone de manifiesto en la información que ha facilitado el Negociado de Gestión Presupuestaria del consistorio, a preguntas del PP en la pasada comisión de estudio de Gobierno Interior.
Del listado de operaciones pendientes de ejecutar por parte de la Generalitat, hasta 602.748 euros corresponden al Fondo de Cooperación Municipal de la Comunidad Valenciana, una línea de recursos que está adscrita a Presidencia del Consell, es decir, quien la activa es directamente el presidente Ximo Puig.
Por otro lado, Mónica Oltra es la única responsable de que la ciudad de Castellón no reciba 1.418.492,5 euros en transferencias corrientes de los Servicios Sociales Generales de la Conselleria de Igualdad y Políticas Inclusivas.
“Es decir, las dos personas que más pregonan que trabajan por los ciudadanos de la provincia y del conjunto de la Comunidad Valenciana son en realidad los que más olvidadas las tienen, puesto que no están cumpliendo con sus obligaciones ni las promesas. Una vez más, los hechos superan a su propaganda y su falta de consideración hacia los castellonenses, a quienes no dejan de subirles los impuestos, pero luego no se traduce en un retorno en inversiones o prestación de servicios básicos”, subraya Begoña Carrasco. “Y todo con el beneplácito de la alcaldesa de Castellón, que prefiere estar callada y tolerar la deuda antes que ponerse del lado de los vecinos y reivindicar lo que les corresponde”, critica.
La portavoz de los Populares asegura que “los datos muestran de forma clara y transparente que Ximo Puig y Mónica Oltra, lejos de ayudar a los castellonenses, son una carga para ellos”. “Ni dan los recursos económicos que prometen a los Ayuntamientos para que puedan financiar sus materias, a pesar de que siempre están erigiendo como adalides del municipalismo, como tampoco para atender cuestiones tan sensibles como las ayudas a la dependencia, el área de atención a la infancia y la adolescencia o la promoción de la red de igualdad”, añade Begoña Carrasco.
A esto se suman 52.200 euros para el área de atención y prevención de las drogodependencias o 14.896 euros para la asistencia ambulatoria en los centros de salud. “Ni siquiera han abonado los 4.000 euros prometidos para la redacción de Prevención de Incendios de la ciudad de Castellón, al que obliga la Conselleria de Agricultura y Medio Ambiente, a pesar de haberlos anunciado”, lamenta.
“La situación que vive el Ayuntamiento de Castellón por la deuda de la Generalitat no es aislada, ya que se calcula que ahora mismo el Consell del PSPV, Compromís y Podemos adeudan más de 25 millones de euros al conjunto de los municipios de la provincia. Está claro que sus prioridades eran repartirse los sillones, colocar a sus amigos y familiares en altos cargos de la administración autonómica, subirse el sueldo y duplicar la cifra de asesores. Desde el 28 de abril, no han tomado ni una sola medida que beneficie a los castellonenses, más allá de su propaganda y las palabras huecas”, indica.
Precisamente, la deuda con los Castellón de la Plana se conoce en el momento que se conoce que Ximo Puig va a sacar la tijera y va a recortar en casi 400 millones de euros las prestaciones de la Generalitat. “No solo nos debe, sino que encima nos va a recortar más. Esto solo se puede traducir en que no se van a construir ninguno de los cuatro colegios que la ciudad tiene pendientes, y que va a haber menos recursos para la Sanidad, a pesar de que las listas de espera ya son interminables y desesperantes, o que no se ha creado ni una sola plaza para atención a los mayores en cuatro años”, denuncia.
“Ni pagan lo que deben ni reivindican la financiación que nos corresponde. Hay que recordar que el modelo de financiación autonómica vigente transfiere a cada castellonense hasta 186 euros al año menos que la media que reciben el resto de los españoles. Un agravio comparativo que significan 31,8 millones de euros menos si se multiplican por los 171.000 castellonenses que residen en la capital de La Plana. Es decir, 127,2 millones de euros solo en la última legislatura”, concluye.