La portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, propone que la remuneración de los ediles con responsabilidad de gobierno esté ligada a su productividad y la mejor manera de medirla es con el grado de ejecución presupuestaria.
“Éste demuestra, sin trampa ni cartón, quién trabaja y quién no. Y el sueldo de la alcaldesa, como responsable última, sea rebajado según el resultado de la media de incumplimiento de todas las áreas”
“El gobierno municipal solo ejecuta los capítulos que le interesa, los que están vinculados a sus sillones y a sus cargos políticos. En materia de inversiones han dejado sin invertir el 57%, es decir, más de 21 millones se han quedado sin invertir en la ciudad de un presupuesto de más de 37 millones; el dinero reservado a vivienda social ha quedado sin gastar en su totalidad, mientras que las partidas derivadas de gastos de Alcaldía, del sueldo del equipo de gobierno, un 50% más caro, más el de sus 21 asesores y el referente a los gastos de propaganda y autobombo se han ejecutado al 100%”
La portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, ha valorado el grado de ejecución presupuestaria del equipo de gobierno a 31 de diciembre, aludiendo a que es la muestra más evidente del trabajo desarrollado por PSOE, Compromís y Unidas Podemos en todo un año. “El balance es muy pobre si se examinan con detalle las partidas que no se han ejecutado frente a las que sí se han gastado, las cuales la mayoría tienen que ver con los gastos directos del gobierno municipal: sus sueldos, los gastos de Alcaldía y asesores del gobierno y lo que gastan en propaganda y autobombo”, señala. La ejecución global es del 85%, “un porcentaje que puede parecer alto pero en el que hay que contabilizar las nóminas de todo el personal del Ayuntamiento y que hace que éste se dispare, pero es que en el 15% que no han ejecutado están las partidas que son la base de su política social: vivienda, violencia de género o igualdad, de las que se ha ejecutado poco o nada. Y llama poderosamente la atención el capítulo de inversiones, del cual se desprende que solo se ha ejecutado un 43% de todo lo que prometieron a los castellonenses, quedando por ejecutar más de la mitad, después de todo un año. De un presupuesto total de más de 37 millones de euros para inversiones, solo se han ejecutado poco más de 16 millones de euros quedando sin invertir 21.300.000 euros”, añade.
Para Carrasco queda constatado que “el discurso de gobierno municipal va por un lado y por otro, muy alejado, lo que realmente hacen, mucho menos de lo que dicen y en algunas materias clave de su acuerdo de gobernabilidad, nada de nada”.
La portavoz de los populares insta al gobierno de Amparo Marco “a ponerse a trabajar para obtener unos resultados para con la ciudadanía, acordes al nivel de sueldos que se adjudicaron al inicio de la legislatura, un 52% más altos que un año antes”. Ante los resultados de un balance de ejecución, donde no caben triunfalismos, Carrasco propone que los concejales del ‘Acord de Fadrell’, es decir, con responsabilidad de gobierno, vinculen sus sueldos a su productividad, como pasa con las pymes y autónomos, y la mejor manera de medir ésta es con el grado de ejecución presupuestaria. “Éste demuestra, sin trampa ni cartón, quién trabaja y quién no. Y el sueldo de la alcaldesa, como responsable última del gobierno, proponemos que sea rebajado según el resultado de la media de incumplimiento de todas las áreas municipales”.
La líder de los populares en la ciudad de Castellón y el concejal popular Juan Carlos Redondo, encargado de fiscalizar los asuntos económicos, han desglosado unos datos de ejecución presupuestaria a 31 de diciembre que, insisten, son “oficiales y públicos”, elaborados por la Oficina de Gestión Económica del Ayuntamiento de Castellón y que se acaban de hacer públicos.
Para los populares, el drama del balance del trabajo del Acord de Fadrell se desvela cuando se desglosan los apartados y los capítulos concretos. Hay áreas del presupuesto en los que la ejecución es directamente cero. “Ni vivienda, ni empleo, que quiero recordar que seguimos teniendo casi 14.000 parados estructurales en la ciudad; ni igualdad, ni presupuestos participativos, ni inversiones… Se ha hecho poco o nada”, subraya Carrasco.
Por su parte, Redondo ha matizado que el gobierno municipal de PSOE, Compromís y Unidas Podemos no es capaz de cumplir lo que prometieron, “aprobaron con retraso el presupuesto de 2019, a finales de enero, y pasaron meses hasta que entró en vigor, y lo mismo pasará con las cuentas de 2020 que todavía no han sido aprobadas y de aprobarse en febrero, como se dice, entrarían en vigor como pronto en el mes de mayo”.
Además, Juan Carlos Redondo recuerda que de los 62,15 millones de euros que sí debían devolver a los bancos por la Ley de Estabilidad Presupuestaria, “resulta que se les ha pagado de manera anticipada 36,1 millones de euros extra desde el año 2015, sin necesidad de que esto fuera así, sin que nadie les obligase a ello, debido a la mala gestión del gobierno municipal. Ni más ni menos que 9 millones de euros que en este 2019 se fueron a los bancos anticipadamente, porque el gobierno de Amparo Marco no supo qué hacer con este dinero que había recaudado. Desde el Partido Popular, insistimos: mejor no recaudarlo si no se va a invertir en más servicios para el ciudadana, antes que ir a los bancos, que lo dejen en el bolsillo de los castellonenses”.
El concejal popular ha destacado las partidas que sí se han gastado al 100%, como la relativa a los sueldos de los concejales del equipo de gobierno y de la propia alcaldesa, sustancialmente mayores que en la legislatura anterior. “La alcaldesa ha pasado de cobrar 58.741,53 euros anuales a 78.554,52 euros y en el caso de los concejales del equipo de gobierno, cada uno de ellos ha pasado de cobrar 41.463,96 euros anuales a 62.400 euros”.
Los gastos en asesores, “también se han incrementado respecto al mandato anterior, pasando de los 14 asesores que tenía el gobierno municipal entre 2015 y 2019 a los 21 de la actual legislatura, lo que supone un incremento del gasto en sueldos de un 167%. Si en 2018 los 14 asesores del gobierno supusieron un desembolso de 227.000 euros, en 2019, con 7 asesores más, el mismo gasto se ha disparado a 739.640 euros”, desgrana Redondo.
Respecto al gasto en propaganda y autobombo, Redondo asegura que los datos confirman que la ejecución está “muy por encima de la media de ejecución del resto de apartados tras ampliarse hasta en dos ocasiones esta partida para llegar hasta los 955.400 euros. Se ha ejecutado el 99% en 2019, es decir 941.196,54 euros”, añade.
“Estamos ante un gobierno que solo ejecuta los capítulos que les interesa, los suyos propios, los que están vinculados a sus sillones y a sus cargos políticos”, denuncia Juan Carlos Redondo.
A modo de conclusión, Carrasco ha recordado que “los castellonenses pagamos unos impuestos de primera desde el día 1 de enero, el primer día del año, a toda velocidad y de los más altos de toda España, tal y como constatan informes del Colegio de Economistas. Sin embargo, tenemos un gobierno municipal que luego no es capaz de gastar todo lo que les reclama, de manera que su dinero se va al banco sin necesidad de que esto fuese así. Lo decimos una y otra vez y, visto que no hacen ningún caso, lo diremos de aquí al 2023. De nada sirve recaudar más al contribuyente si al final el dinero no revierte en mejores servicios para el ciudadano. Por tanto, reclamamos una bajada de impuestos, porque hay margen”.
