La portavoz del Grupo Municipal Popular en el Ayuntamiento de Castellón denuncia que los castellonenses han dejado de recibir 160 millones de euros solo en la última legislatura por no revisar el modelo de financiación, un asunto que “ha pasado de estar en el primer punto de la agenda del presidente Puig cuando gobernaba Mariano Rajoy a desaparecer, para no molestar a sus jefes de filas Pedro Sánchez”.
“Es hora de que Ximo Puig y Amparo Marco sean el presidente de la Generalitat y la alcaldesa de todos los castellonenses, en lugar de defender única y exclusivamente los intereses de su partido”, indica Carrasco, quien tiende la mano para buscar consensos pero también anuncia que será “reivindicativa y exigente” a la hora de reclamar los servicios, inversiones y proyectos que necesita Castellón.
La portavoz del Grupo Municipal en el Ayuntamiento de Castellón, Begoña Carrasco, asegura que “Ximo Puig adeuda a Castellón un nuevo modelo de financiación y una batería de infraestructuras productivas, para contribuir a que las empresas de Castellón sean competitivas, como el Corredor Mediterráneo o los accesos al puerto”.
Carrasco ha realizado estas declaraciones tras participar, junto al portavoz adjunto del Grupo Municipal Popular, Sergio Toledo, y otros miembros de su equipo, en la recepción institucional que hoy ha brindado el Ayuntamiento de Castellón, presidida por la alcaldesa Amparo Marco, al presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig.
“Castellón no puede esperar más. El presidente Puig lleva cuatro años en el cargo, tiempo más que suficiente para desarrollar políticas que beneficien a los castellonenses con inversiones que son justas e irrenunciables. Sin embargo, sus primeros cuatro años han dejado en nuestra capital un desierto de actuaciones. Es hora de anunciar menos y hacer más”, ha subrayado.
En este sentido, la líder de los Populares en el Ayuntamiento de Castellón recuerda que “solo en la legislatura 2015-2019, los castellonenses han dejado de percibir más de 160 millones de euros para la prestación de servicios e inversiones del Estado por la falta de un nuevo modelo de financiación, a razón de 40,2 millones de euros menos por año, ya que cada castellonense recibe de media 237 euros menos que el resto de los españoles”. “Sin embargo, esta cuestión que el PP siempre ha defendido como prioritaria, ha pasado de estar en el primer punto de la agenda del presidente Puig cuando gobernaba Mariano Rajoy a desaparecer, para no molestar a sus jefes de filas Pedro Sánchez. Tan importante era entonces como lo es ahora. Es hora de que los castellonenses reciban lo que les corresponde, en igualdad al resto de españoles. Ni más, ni menos”, ha añadido.
“Y lo mismo ha ocurrido con infraestructuras fundamentales para el futuro de nuestra ciudad. Desde que Pedro Sánchez ha llegado a la Moncloa, el Consell no ha hablado más del Corredor Mediterráneo. Exigimos que se cumpla con el calendario de inversiones programado y que se aceleren los trabajos, que deberían estar concluidos en este mismo ejercicio y que el Ministerio de Fomento del PSOE tiene bloqueados”, indica. “Lo mismo ocurre con otras infraestructuras básicas, como los accesos ferroviarios por el sur al Puerto de Castellón, la estación intermodal o la liberalización de la autopista AP-7, cuya concesión concluye el próximo 31 de diciembre de 2019 y de la que nada más se sabe”, denuncia.
Por otro lado, Begoña Carrasco le ha recordado que en la capital de la Plana sigue estando pendiente la ejecución del centro de Salud del Raval Universitari, la ampliación de las Urgencias del Hospital General, el nuevo colegio Vicent Marçà, la reforma de los centros educativos Herrero y Elcano o una nueva residencia de la tercera edad, anunciada para ejecutarse en la calle Onda y de la que ahora solo hay pintada cuatro líneas en el Plan General. “Es lo que tiene no haber hecho nada en estos cuatro años, que la lista de asuntos pendientes es muy larga”, enfatiza.
“Es hora de que Ximo Puig y Amparo Marco sean el presidente de la Generalitat y la alcaldesa de todos los castellonenses, en lugar de defender única y exclusivamente los intereses de su partido. El Grupo Municipal Popular será leal y apoyará, desde la negociación, el diálogo y el consenso, cuantos asuntos sean positivos para el conjunto de los castellonenses y contribuyan a reforzar la capitalidad de Castellón, porque estas cuestiones no entienden de colores políticos. Pero también vamos a ser reivindicativos y exigentes a la hora de defender los proyectos, inversiones, servicios e infraestructuras que necesita nuestra ciudad, y que nunca llegan con el PSOE, con el beneplácito de Compromís y Unidas Podemos, que se han convertido en colaboradores necesarios y complacientes de sus socios de gobiernos”, ha concluido Begoña Carrasco.