Un templo de la gastronomía
Todos aquellos que me conocen, saben que siempre he sido muy crítico con la gastronomía local al considerar, es una opinión personal, que no está a la altura de una ciudad como Castellón de la Plana que pretende su promoción turística.
Puede que sea demasiado exigente, pero procedo de una tierra donde la gastronomía forma parte de nuestra cultura y la buena mesa se cuida con esmero como auténtico estandarte de la zona.
Pero nunca se puede generalizar. En Castellón hay un auténtico oasis de la buena, la de verdad, gastronomía.
Hablo de Casa Lola, en el nº5 del Paseo Buenavista del Grao.
Gastronomía es mucho más que una buena cocina.
La puesta en escena de Casa Lola llama la atención. Mantel de tela de blanco inmaculado, servilletas a juego debidamente presentadas sobre el plato, cubertería y cristalería adecuada, la sensación de orden, limpieza y profesionalidad salta a la vista.
Gastronomía es mucho más que buena cocina y buena puesta en escena.
La atención de la propietaria, desde la llegada hasta el final de la cena, demuestra su compromiso con la profesión, los camareros están a la altura del local, profesionales, amables y cercanos al cliente.
Ya había visitado anteriormente Casa Lola, creo que fue con motivo de las “Jornadas de la Galera”, y salí francamente satisfecho.
Como anécdota, aunque para mí, personalmente, es un tema muy serio, les comento que me sorprendió, es muy difícil encontrar en Castellón a alguien que lo entienda, que la “maître”, título muy merecido en esta ocasión, también tuviera los mínimos conocimientos necesarios como sommelier para saber que el vino tinto debe servirse a 16 grados.
Por último, les relato las viandas que nos sirvieron, respetando perfectamente los tiempos, y que convirtieron la noche en una fiesta para nuestro olfato, paladar y buen gusto.
Antxoas del Cantábrico, de excelente sabor, calidad, tamaño y textura. Carpaccio de bacalao, su sabor era una explosión de alegría en nuestras bocas. Almejas al estilo Galicia, si buenas las almejas mejor aún su preparación. Suquet de rape y gambas rojas, calidad suprema y guiso perfecto. Y entrecot de ternera, en su punto perfecto de oreado y asado. Cerramos compartiendo tarta de chocolate y de requesón que hacían gala a su presentación como repostería casera.
Que la gastronomía es mucho más que buena comida lo entienden a la perfección en Casa Lola…¡No se lo pierda!
