El documento incorpora 12 objetivos y 20 acciones hasta 2025 para la prevención en ámbitos como el escolar, familiar y comunitario
El Ayuntamiento de Castellón ha aprobado en el pleno municipal de este mes de febrero el II Plan Municipal de Drogodependencias y Otros Trastornos Adictivos a desarrollar durante el periodo 2022-2025 y que incorpora un total de doce objetivos específicos y veinte acciones a desarrollar en cuatro ámbitos de actuación (escolar, familiar, comunitario y ámbito de prevención selectiva e indicada). El objetivo principal de este segundo plan es desarrollar actuaciones en materia de prevención de las conductas adictivas y coordinar los recursos municipales para reducir los factores de riesgo asociados a las drogodependencias y otros trastornos adictivos, atendiendo a las necesidades detectadas en los cuatro ámbitos de actuación.
La concejala de Bienestar Social, Dependencia e Infancia, Mary Carmen Ribera, ha explicado que este plan “da continuidad al aprobado inicialmente en 2016 y prorrogado hasta el pasado 2021” y que ha facilitado al consistorio “las herramientas para coordinar y ejecutar políticas más eficaces de prevención e integración social en materia de drogodependencias u otras adicciones”. “Ahora, este nuevo plan actualiza la situación actual en la ciudad para detectar nuevas necesidades y poder abordar nuevas problemáticas de manera que aumenta la efectividad de las políticas de prevención”, ha indicado.
Así, para la elaboración de este II Plan se ha realizado un análisis previo para lo cual se ha contactado con los organismos y entidades de Castellón especializadas en el tratamiento de las drogodependencias y otras adicciones. De esta manera, el nuevo plan plantea la intervención en el ámbito escolar a través de programas de prevención en edades tempranas. En el ámbito familiar, se ha considerado necesaria la participación de la familia, definiendo intervenciones para dotar a las familias de herramientas y asesoramiento técnico que, a su vez, les permita aplicar estrategias preventivas.
Además, en el ámbito comunitario, se abordará la normalización que actualmente existe entre la población ante el consumo de alcohol, cannabis y otras drogas en momentos de ocio y fiestas. Para ello, se adaptarán las campañas de concienciación a la realidad local y se ofrecerá a la población juvenil alternativas al modelo de ocio dominante. El nuevo plan también abordará las problemáticas d ellas personas y colectivos más vulnerables en el ámbito de la prevención selectiva e indicada.
En total, el II Plan recoge una veintena de acciones para la consecución de doce objetivos enmarcados en los cuatro ámbitos de actuación citados.
Por otro lado, en cuanto al balance del plan anterior destaca la consecución del 100% de los objetivos en cuanto a la realización de programas de prevención escolar habiendo alcanzado a un total de 43.367 alumnos de Primera y Secundaria principalmente entre los años 2016 a 2020. En el ámbito familiar, un total de 2.797 personas han participado en el programa de prevención familiar ofertado en centros educativos. Además, en el ámbito de prevención selectiva e indicada, destaca la convocatoria anual de subvenciones para entidades del tercer sector para la financiación de programas especializados a desarrollar en el municipio. Algunos de estos programas han sido los programas sobre juego patológico, de atención a adolescentes, de atención a familias, programas de abuso de alcohol, o programas de contacto directo con usuarios de drogas en espacios abiertos, entre otros. También se ha proporcionado información, formación y recursos para la reducción del riesgo y del daño asociado al consumo de sustancias adictiva a la práctica totalidad de las demandas recibidas por parte de los agentes sociales relacionadas con población de riesgo medio y alto.