La Concejalía de Transición Ecológica destaca que esta técnica impulsa la economía circular
La Concejalía de Transición Ecológica del Ayuntamiento de Castellón proyecta la bioconstrucción a través de un nuevo mural decorativo realizado con materiales respetuosos con el medio ambiente y por empresas de proximidad. La serigrafía luce en el parque de Rafalafena y fue diseñada durante la segunda edición de las Jornades Construint i Alimentant Alternatives.
“La bioconstrucción utiliza materiales más sanos y saludables, más inocuos que los tradicionales y sin aditivos; que fomentan la economía circular al ser reciclables o reciclados. Una técnica que reduce la generación de residuos y mejora la eficiencia energética. También apuesta por productos de proximidad y ayuda a la economía local”, explica el concejal de Transición Ecológica, Fernando Navarro, que resalta que la bioconstrucción se presenta como una alternativa para minimizar el impacto en el medio ambiente, reducir el consumo y gasto energético e incidir en la lucha contra el cambio climático.
El mural en el parque Rafalafena fue elaborado por la cooperativa Okambuva con la colaboración de voluntarios apuntados durante la II Jornades Construint i Alimentant Alternatives. La actividad consistió en una práctica de muralismo y esgrafiado con cal procedente de una empresa del entorno.
La Concejalía de Transición Ecológica colaboró el pasado año en diferentes talleres de bioconstrucción e impulsó en la primera edición de Construint i Alimentant Alternatives la construcción de un banco con tapial tradicional, formado por paja y barro.