Marco destaca el papel del máximo órgano de participación ciudadana para definir los proyectos de ciudad y las claves de la recuperación social y económica
El Consejo Social de la Ciudad (CSC) ha dado cuenta de su actividad durante los años 2019 y 2020, en los que ha destacado su participación activa en la definición de la estrategia de recuperación social y económica de Castellón ante la covid-19, además de su contribución en otros temas de ciudad como el Plan General, los presupuestos o la Agenda Urbana. En el pleno extraordinario del máximo órgano consultivo de Castellón celebrado esta misma semana, se aprobó el informe que resume la actividad del CSC en los dos últimos años.
“El Consejo Social de la Ciudad, como máximo órgano de participación ciudadana de Castellón, ha tenido un protagonismo especial a la hora de definir las claves de la recuperación ante una crisis sanitaria sin precedentes como la de la covid-19. Con su colaboración, a través de la Comisión de Impulso, hemos definido 145 medidas que refuerzan la estrategia municipal para paliar los efectos sociales y económicos de la pandemia”, ha explicado la alcaldesa de Castellón y presidenta del Consejo Social. “Unas acciones que generan nuevas oportunidades para nuestros vecinos y vecinas y que ponen de manifiesto la importancia de este órgano de participación, con el que hemos contado de nuevo en un tema de ciudad y que nos ha ayudado a canalizar las necesidades de la ciudadanía y mejorar entre todos y todas su calidad de vida”, ha resaltado Marco.
Así, y según recoge el último informe de actividad, en 2019, en la sesión de 11 de abril, se ratificó la renovación de la composición de la Comisión de Trabajo de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Sostenibilidad Ambiental, que tuvo como cometido principal emitir informe sobre la versión inicial del Plan de Ordenación Pormenorizada y, en la sesión de 10 de diciembre, se creó la Comisión de Trabajo de Hacienda y Desarrollo Económico, que tendría por objeto la elaboración, a la vista del presupuesto del ejercicio anterior, de la propuesta de criterios y recomendaciones para elaborar el presupuesto.
Así, y según recoge el último informe de actividad, en 2019, en la sesión de 11 de abril, se ratificó la renovación de la composición de la Comisión de Trabajo de Ordenación del Territorio, Urbanismo y Sostenibilidad Ambiental, que tuvo como cometido principal emitir informe sobre la versión inicial del Plan de Ordenación Pormenorizada y, en la sesión de 10 de diciembre, se creó la Comisión de Trabajo de Hacienda y Desarrollo Económico, que tendría por objeto la elaboración, a la vista del presupuesto del ejercicio anterior, de la propuesta de criterios y recomendaciones para elaborar el presupuesto.
En el año 2020, con la aparición de la crisis sanitaria de la covid-19, se consideró que el Consejo Social de la Ciudad, como principal órgano consultivo y de participación ciudadana, tuviera un protagonismo especial a la hora de definir las claves de la recuperación, de la generación de confianza y certidumbre, con el establecimiento de medidas económicas, políticas activas de empleo, recuperación del bienestar público y desarrollo de las potencialidades de las nuevas tecnologías, la economía digital y la transición ecológica. De este modo, en sesión de 6 de julio, se aprobó la creación y composición de la Comisión de Trabajo del Impulso de Castellón, cuyo cometido sería la elaboración de un informe con las propuestas y recomendaciones para el proyecto de recuperación de Castellón de los efectos económicos y sociales derivados de la crisis sanitaria de la covid-19.
El mismo documento incluye los objetivos del 2021, uno de los cuales ya se materializó en el pleno de esta semana, con la aprobación por unanimidad del informe de la Comisión de Impulso de Castellón, que recoge 145 medidas articuladas en dos líneas de actuación: políticas sociales y de cuidados, salud pública y sanidad; y reactivación económica y recuperación del empleo y la innovación.
También se fija para este año que el Consejo Social de la Ciudad tenga una participación activa en las reuniones de la Agenda Urbana de Castellón 2030. “Contamos así con el máximo órgano de participación ciudadana de la ciudad, amplio y plural, para elaborar con su colaboración un documento estratégico que integrará las políticas urbanas, actuaciones que permitan transformar Castellón con parámetros de sostenibilidad social, ambiental y económica”, ha apuntado la alcaldesa. “De esta manera, avanzamos en la Agenda Urbana de Castellón, que será referente a nivel estatal, tal y como suscribimos en el convenio con el Ministerio, convirtiendo a Castellón en ejemplo para que otros municipios definan su modelo de desarrollo urbano sostenible durante los próximos años”, ha subrayado Marco.