Coches de segunda mano en España: ‘Ventas reducidas y precios en aumento’

Coches de segunda mano en España: ‘Ventas reducidas y precios en aumento’

El precio de los coches de segunda mano sigue subiendo. Y no tiene pinta de mejorar este año.

 

De acuerdo con los datos proporcionados por Ancove, la Asociación Nacional de Comerciantes de Vehículos, el mercado de vehículos de ocasión registró una caída del 5,6% en el último año en comparación con 2021. Durante el año 2022 se vendieron un total de 1.885.558 turismos de segunda mano, con un precio medio de 12.600 euros.

A pesar de la disminución de la demanda, los precios de los coches de segunda mano no han disminuido en el comienzo de 2023. Según los mismos datos de Ancove, el precio medio en enero de 2023 se situó en los 12.621 euros. Esta tendencia de menos ventas y precios más elevados sigue la misma línea que el mercado de coches nuevos en España.

Los vehículos de segunda mano: más antiguos y costosos

Según Ancove, los precios de los turismos de ocasión apenas han aumentado un 4,7% en los últimos cuatro años, es decir, desde enero de 2019. Sin embargo, desde esa fecha y hasta finales de 2021, se había registrado una disminución en los precios de los vehículos de segunda mano. En enero de 2020, previo a la pandemia, el precio promedio de un vehículo de segunda mano era de 10.730 euros.

A pesar de ello, los coches de segunda mano siguen envejeciendo y aumentando su coste.

El aumento de los precios de los coches de segunda mano: una consecuencia de la crisis de los microchips y la escasez de vehículos nuevos

Los precios de los vehículos de segunda mano comenzaron a aumentar durante la crisis de los microchips y los problemas de abastecimiento que afectaron a los fabricantes. Con la falta de disponibilidad de coches nuevos y los tiempos de entrega de hasta un año, muchos clientes optaron por adquirir un coche de segunda mano reciente.

El problema es que los vehículos de segunda mano recientes provienen principalmente del mercado de coches nuevos, y con las ventas a la baja, hay menos unidades disponibles en el mercado de vehículos de ocasión. Como resultado, se ha producido un aumento generalizado de precios en el sector.

La disminución de las ventas de coches nuevos ha provocado una reducción del número de vehículos de ocasión que ingresan en el mercado. La gente conserva los coches durante más tiempo en modalidades de renting o financiación, mientras que los fabricantes no necesitan recurrir a las automatriculaciones, ya que están lidiando con la satisfacción de la demanda.

La escasez de coches recientes se traduce en un aumento generalizado de los precios de los vehículos de segunda mano, incluso de los más antiguos.

La falta de disponibilidad de coches recientes ha aumentado aún más los precios de los coches de segunda mano, incluyendo los vehículos de más de ocho y de 10 años, que representan la mayoría de las ventas de coches usados en España. De los 1,8 millones de vehículos usados vendidos en España en 2022, 1.143.321 coches tenían más de 10 años.

En enero de 2023, se vendieron 133.292 coches de segunda mano, de los cuales 82.722 tenían más de ocho años, con un precio promedio de 9.432 euros en el caso de los últimos. Este aumento de los precios se debe a la falta de oferta de vehículos usados, lo que está generando una mayor demanda y un aumento en los precios en general.

¿Que pasa con los microchips?

La escasez de microchips ha influido en el aumento de los precios de los coches de segunda mano, y aunque las ventas del sector han disminuido, no se espera que los precios bajen en un futuro cercano debido a dos razones principales.

La primera razón es la inflación, que, aunque ha disminuido en los últimos meses, sigue siendo alta con una tasa del 5,8% en enero de 2023. Los precios subieron en parte debido a la inflación, y aunque la tasa de inflación se está ralentizando, esto no significa necesariamente que los precios de los coches de segunda mano vayan a bajar en el corto plazo. Lo más probable es que se mantengan en niveles elevados.

Y la segunda razón por la que los precios de los coches usados podrían no bajar tiene que ver, de nuevo, con la escasez de suministros de microchips. Aunque muchos fabricantes esperaban que la situación se normalizara en 2023, parece que este año no será mejor que el anterior.

Por ejemplo, Honda está teniendo problemas para producir suficientes unidades del Honda Civic, ya sea en su versión híbrida e:HEV o en la deportiva Type R, y ha anunciado que dejará de vender 250.000 coches entre marzo de 2022 y marzo de 2023 debido a la escasez de microchips. Además, se espera que los efectos de esta crisis se sientan hasta la segunda mitad de 2023.

La industria automotriz sigue enfrentando problemas con la escasez de chips, según lo reconocido por el director financiero de Ford, John Lawler. Además de Honda y Ford, muchas otras marcas también se encuentran en la misma situación, lo que se evidencia en los plazos de entrega de más de seis u ocho meses para un coche nuevo en muchas marcas. Esta situación indica que la crisis de los microchips continuará afectando al sector automotriz en el corto plazo.

Debido a la escasez de microchips, los fabricantes de automóviles tienen menos producción y por lo tanto, menos coches nuevos que llegan al mercado. Además, los microchips utilizados por los fabricantes de automóviles suelen ser semiconductores más sencillos que los de productos de electrónica de consumo e informática. Por esta razón, no se espera que los precios de los coches de segunda mano bajen de forma significativa en los próximos meses.