Aunque el objetivo es ganar la guerra y no solo una batalla, es importante empezar con victoria parcial ya que el camino a recorrer va a ser duro y lleno de incomprensiones. Aquellos que me siguen saben que siempre he huido de los medios días habiendo días enteros y que también siempre he sido duro...
Aunque el objetivo es ganar la guerra y no solo una batalla, es importante empezar con victoria parcial ya que el camino a recorrer va a ser duro y lleno de incomprensiones.
Aquellos que me siguen saben que siempre he huido de los medios días habiendo días enteros y que también siempre he sido duro con quienes siembran dudas y engaños. Me parece mucho más honrada la posición de Compromís o Podemos que la que mantienen PSOE,PP o Cs. Los primeros no engañan a nadie, podrás o no compartir sus ideas pero vienen siempre de frente y juegan con las cartas boca arriba. De los otros, depende de quién sea el portavoz, puedes escuchar versiones contradictorias de un mismo hecho o de una misma intención política y si particularizamos en Cs ya es el colmo, lo que opinen hoy no tiene nada que ver con lo que opinarán mañana y hasta el cambio de temperatura les hace modificar su criterio sobre asuntos de Estado.
Parece que VOX está más próximo a Compromís y Podemos que al “triunvirato” constitucionalista, al menos en mantener sus promesas y sus convicciones.
Prometió a sus votantes que defendería los valores perdidos y combatiría la mentira, lo políticamente correcto y el pensamiento único y hoy ha empezado a cumplir la palabra dada anunciando que presentará una enmienda a la totalidad de los Presupuestos de Andalucía.
La razón solo una y muy valiosa, “parecen redactados por el PSOE”. No podemos decir que VOX no tenga razón ya que en los mencionados presupuestos se han vuelto a contemplar partidas millonarias para dos mentiras, para dos manipulaciones de la verdad, la violencia de género y la memoria histórica.
En la primera se ha demostrado que cuanto más dinero se ha puesto para supuestamente combatirla, más víctimas hay, al mismo tiempo que aparecen, como si de una plaga se tratara, asociaciones relacionadas con el tema que viven de la subvención sin que un solo euro de los muchos que reciben vaya a parar a las mujeres que dicen defender, abandonando a su suerte, para más desvergüenza, a maltratados si son hombres, niños o ancianos.
Con la segunda, la “memoria histórica”, creada exclusivamente para el aleccionamiento de los ciudadanos y para tapar la sangre derramada por la izquierda en periodos tan negros de nuestra reciente historia como el que va de 1931 a 1936, quieren instaurar el pensamiento único para que sea el Estado, al más puro estilo del fascismo marxista, quien piense por ti.
A ver si cunde el ejemplo de VOX y el resto de partidos, al menos aquellos que presumen de constitucionalistas, ponen el mismo empeño que la formación de Santiago Abascal en defender algo tan sagrado como la libertad individual de los españoles.