El seguimiento de esta iniciativa estará disponible para la comunidad a través del acceso al área privada de la aplicación móvil asociada al sistema.
El reparto de cubos a los residentes del barrio de San Jaime, en l’Alcora, marca el inicio de la implementación gradual del sistema de recogida de residuos puerta a puerta, prevista para el próximo 6 de mayo. Las jornadas de distribución se llevarán a cabo en la plaza de la calle Serreríes en diferentes horarios: el jueves 25 de abril, de 16 a 20 horas; el viernes 26 de abril, de 10 a 14 horas y de 16 a 20 horas; y el sábado 27 de abril, de 10 a 14 horas.
El alcalde, Samuel Falomir, ha enfatizado que estos cubos son imprescindibles para participar en la recogida selectiva puerta a puerta. Cada familia recibirá dos cubos marrones: uno de menor tamaño y ventilado para separar los residuos orgánicos en el hogar, y otro de mayor capacidad para sacar a la calle con una bolsa dentro. Ambos estarán identificados con un código informático que se vinculará con el usuario a través de una aplicación móvil. Esta medida no solo permitirá realizar un seguimiento del sistema de recogida, sino también evaluarlo y ajustarlo según sea necesario. Además, servirá para identificar a los usuarios que no cumplen adecuadamente con el sistema o que requieren más información sobre el servicio.
El seguimiento de esta iniciativa estará disponible para la comunidad a través del acceso al área privada de la aplicación móvil asociada al sistema. En el momento de la recolección de los contenedores, se informará si es necesario acceder al área de depósito, que es el lugar designado para desechar residuos con acceso restringido. Se han establecido diversos horarios para garantizar que todos los ciudadanos puedan acceder fácilmente.
El alcalde Falomir ha subrayado que, después de un extenso período de análisis, este modelo se considera el más efectivo, tanto desde el punto de vista ambiental como económico. Por un lado, este enfoque fomenta un mayor y mejor reciclaje, lo que resulta en ahorro de recursos naturales, energía y agua, así como en la reducción de emisiones de gases de efecto invernadero. La reducción de residuos enviados a vertederos es crucial, ya que de lo contrario se necesitarían construir nuevos sitios de eliminación con impactos ambientales significativos en un futuro cercano.
Por otro lado, incrementar el reciclaje redundará en una tasa más baja que los vecinos deberán abonar a partir de 2025, según lo estipula la ley. El objetivo es claro: reciclar más para pagar menos.
El alcalde enfatiza que no se busca imponer nada, sino más bien colaborar con los residentes en este proceso. Por ello, se está llevando a cabo una campaña informativa y de concienciación, y se iniciará una prueba piloto en un barrio de l’Alcora para evaluar su funcionamiento, corregir posibles fallos y determinar su viabilidad.
