El alcalde de Vila-real, José Benlloch, y el concejal de Territorio, Emilio M. Obiol, han visitado esta mañana el inicio de los trabajos para el derribo de las antiguas instalaciones de la empresa Herarbo y la apertura y urbanización de las calles Alfred Nobel, Isabel de Villena y Cariñena.
Benlloch ha resaltado la importancia histórica de este inicio de las obras para el distrito del Hospital. «Abrir estas calles ha sido una reivindicación de los vecinos y vecinas durante tres décadas». “Estamos frente a un plan del siglo XXI para mejorar el crecimiento de un distrito en el que se concentran un buen número de dotaciones y servicios como tres centros educativos, el centro de sanidad de Cariñena, la Biblioteca Universitaria del Conocimiento o la Oficina del Instituto Nacional de la Seguridad Social”, ha señalado el primer edil.
El presente equipo de gobierno ha hecho posible el derribo de las antiguas instalaciones de Herarbo gracias a una diligencia urbanística “eficaz y capaz” puesto que se ha firmado un novedoso convenio con los propietarios del suelo a través del cual el Consistorio avanza el coste de la urbanización, adjudicada a Pavasal por 146.000 euros, pero posteriormente recuperará esta inversión a través de las cuotas de urbanización correspondientes en el momento en que los solares resultantes vayan desarrollándose para la construcción de viviendas.
