Recogemos otra carta remitida a este periódico por un vecino de Montornés
El texto es transcripción fiel y exacta de la carta recibida con fecha de hoy 11 de abril. Omitimos la firma para proteger la identidad de nuestro lector y cumplir con la Ley de Protección de Datos.
Hace unos días se publicó en prensa la insostenible situación que vivimos en la Urbanización de Montornés por la plaga de jabalíes.
Al parecer, en la Conselleria están molestos por esas denuncias. Sin embargo, todo lo que se ha publicado es verdad y se han quedado cortos.
Al ritmo de reproducción de los jabalíes, en 3 o 4 años tendremos que marcharnos de nuestras casas. La cifra publicada de unos 12.000 jabalíes en el Desierto dentro de varios años, no es nada descabellada.
Todos somos culpables por no habernos dado cuenta de lo que se nos venía encima. No obstante, los auténticos responsables son los políticos que han preferido cerrar los ojos a la realidad y que han preferido proteger a los animales antes que a las personas.
Es verdad que los jabalíes levantan la valla de la autopista y la cruzan todos los días por la noche. Todos los vecinos de esta zona, lo sabemos.
También es cierto que en ciertos lugares de Montornés cuando tiramos la basura por la noche tenemos que comprobar que no hayan jabalíes junto al contenedor.
También es cierto que es habitual ver los contenedores de basura por el suelo y que a partir de las 10:00 de la noche oímos sus gruñidos y no dejamos salir a los niños por los riesgos que puedan correr.
No estamos hablando de política ni criticando a ningún partido político. Es una cuestión grave, de sentido común y que afecta a muchas personas.
Es una irresponsabilidad no actuar a sabiendas de que los jabalíes atraviesan de forma habitual la autopista. Puede afectar al turismo. No sé qué pensarían los turistas europeos si supiesen que los jabalíes atraviesan la autopista sin qué nadie haga nada.
Ruego a los políticos que actúen cuanto antes para reducir drásticamente el número de jabalíes en el Desierto de las Palmas para evitar desgracias en la Autopista y en las Urbanizaciones.
Haciendo batidas muy a menudo y colocando cajas trampa en los barrancos, es posible que pudiese revertirse esa situación.
Atentamente