Acusan a Carrasco de “traicionar” a la juventud y apostar por el vehículo privado al eliminar el autobús gratuito para menores de 30 años.
La propuesta del equipo de gobierno de PP y Vox de eliminar la gratuidad del bono de transporte urbano para menores de 30 años en Castelló «constituye una traición evidente a la juventud de la ciudad por parte de la alcaldesa, Begoña Carrasco, quien parece priorizar el beneficio económico a expensas de las familias».
Así lo destaca Jorge Ribes, concejal del Grupo Municipal Socialista, al recordar que el Ayuntamiento de Castelló, con el respaldo del Gobierno de Pedro Sánchez durante 2023, «podía mantener la gratuidad de los bonos de autobús para los jóvenes, pero la Sra. Carrasco y su concejal de Movilidad, Cristian Ramírez, han optado por cobrarles a pesar de ser una propuesta viable y de gran ayuda para las familias«.
En este contexto, Jorge Ribes lamenta que «los jóvenes estén perdiendo derechos adquiridos gracias a las políticas de los gobiernos progresistas», al tiempo que señala que «no nos sorprende, ya que estamos acostumbrados a que el gobierno de la derecha y la ultraderecha en esta ciudad sea sinónimo de manipulación, mentiras y abandono de la clase media y trabajadora».
Según el concejal socialista,
Escuchar a Ramírez decir con satisfacción que los precios y bonos aprobados para 2024 en el transporte público de la ciudad satisfacen las necesidades de los castellonenses es una desfachatez asombrosa, porque lo único que estamos viendo es que han eliminado una ayuda crucial para fomentar el uso del autobús urbano entre los menores de 30 años.
Además, Ribes recuerda que los demás precios y bonos anunciados «son exactamente los mismos que implementó el PSPV en estos últimos años, por lo que están haciendo un copia y pega de todas nuestras medidas, aplicando como gran apuesta del PP y Vox la supresión de la gratuidad para la juventud«.
Para Jorge Ribes, «estas medidas no hacen más que confirmar lo que hemos venido diciendo en estos meses: que la Sra. Carrasco y sus socios de la ultraderecha quieren volver a llenar nuestra ciudad de coches, como hemos visto con la decisión de permitir el acceso libre de vehículos privados al centro, aumentando así los niveles de contaminación en la ciudad y haciendo caso omiso de las medidas que exige Europa».
