El equipo de gobierno quiere que las cuentas públicas vuelvan a estar abiertas a la oposición y ya ha contactado con el Partido Popular para cerrar una primera reunión de trabajo.
La Diputación de Castellón ha aprobado una modificación de crédito para consignar un activo financiero de nueve con dos millones de euros cara la preparación de los presupuestos de dos mil veintitrés, usando 4 millones de euros que aún quedan de remanentes de tesorería y los recursos provenientes de bajas y de partidas que ya no se van a poder ejecutar en el presente ejercicio.
Conforme ha explicado en un comunicado el Diputado de Hacienda, Santiago Agustí,
Se acomete una optimización presupuestaria con el propósito de tenerlo todo preparado para con el comienzo del nuevo año resulte posible empezar a ejecutar las nuevas cuentas públicas de la corporación.
Unos presupuestos que, como en años precedentes, el equipo de gobierno desea abrir a la participación de los conjuntos de la oposición, razón por la que ya se ha contactado con el PP de cara a cerrar una data para festejar una primera asamblea de trabajo.
Santiago Agustí ha explicado que «como de año en año, comenzamos el proceso con voluntad de diálogo y acuerdo, por el hecho de que estimamos que es esencial la aportación de todos conjuntos».
El Diputado piensa que «es esencial ser eficientes, mas asimismo ser veloces» pues «las previsiones apuntan que dos mil veintitrés va a ser un año lleno de dificultades, esencialmente por la inseguridad que produce la guerra, y lo idóneo sería empezar el ejercicio con las cuentas activas desde el primer instante para poder transferir lo antes posible fondos a los municipios y activar los programas que impulsa la Diputación, que una buena parte de ellos, está relacionado con la atención la atención a las personas mayores y los servicios sociales en los pequeños ayuntamientos de interior«.
