El total de los lotes es un reflejo del patrimonio artístico de la localidad a lo largo de los últimos ciento cincuenta años y recoge todo género de modelos cerámicos de tipo artístico y ornamental.
El Museo del Azulejo Manolo Safont de Onda (Castellón) ha presentado este lunes el cómputo de las donaciones más esenciales que ha recibido en la primera mitad de dos mil veintidós, entre aquéllas que sobresalen las ilustraciones de Mezquita Almer y abundantes ejemplos de cerámica ondense fabricada en el siglo XIX.
El total de los lotes es un reflejo del patrimonio artístico de la localidad a lo largo de los últimos ciento cincuenta años y recoge todo género de modelos cerámicos de tipo artístico y ornamental, aparte de publicaciones especializadas y alguna pintura paisajística de la ciudad, explica el consistorio.
Este museo se ha transformado en un referente de la obra de Juan Mezquita Almer merced a las donaciones de José Piquer Gil y de la nieta del artista, Ana Valentín Mezquita. Almer fue un ilustrador, ceramista y dibujante de origen ondense que se especializó en trabajos editoriales y dibujo de anuncios para gacetas de los años treinta.
Entre las novedades de este autor hay múltiples ejemplos de viñetas comerciales de carácter vanguardista. Además de esto, han llegado a la galería un total de treinta y ocho bocetos originales, numerosas postales y una lámina, todos con gran valor estético.
El resto de donaciones están dedicadas prácticamente solamente a piezas cerámicas artísticas de diferentes temporadas. Despuntan las obras donadas por Roberto Meneu Franch, que ha reunido durante su vida azulejos y objetos que van desde la segunda mitad del XIX hasta los años noventa del XX, con un total de doscientos treinta y tres modelos.
En esta compilación sobresalen las piezas de mayor antigüedad, efectuadas en la factoría de ‘La Valenciana‘, y los múltiples ejemplos del propio azulejado modernista hecho en Onda a inicios del siglo pasado.
En paralelo, es muy significativa la aportación de Ángel Benedito Piquer, que ha contribuido con útiles y herramientas del taller del ceramista Amadeo Benedito Gea al lado de 4 pinturas cerámicas y una acuarela. El Museo del Azulejo ya dedicó el año pasado una exposición a este artista ondense merced a los préstamos de sus hijos.
Búcaros, cornucopias, platos, pinturas, bandejas o paneles son ciertas piezas que integran la completa gama de donaciones recibidas a lo largo de estos 6 meses. El cómputo total supera los mil objetos, que se completan con publicaciones expertas en cerámica como revistas o enciclopedias que engrosarán el fichero.
Como edil responsable del Museo del Azulejo, María Prades defiende que es esencial respaldar su papel para dar a conocer y conservar la historia de la localidad de Onda. Asimismo anima a la ciudadanía a donar y asistir en esta tarea de conservación del patrimonio.
‘CULTIVANT LA INTROSPECCIÓ‘
En la programación, la exposición ‘Cultivant la introspecció‘, de la ceramista ondense Carmen Ballester Remolar, va a estar disponible en el Museo del Azulejo hasta el veintisiete de noviembre. Ballester es una artista reconocida a nivel internacional en su campo, con estancias en el país nipón y galardones por su tarea de experimentación con la cerámica.
En mil novecientos ochenta y uno expuso en el Museo Nacional de Porcelana ‘González Martí‘, tras lo que su obra ha recorrido todo el globo. Esta muestra, centrada en sus últimos años de trabajo, cuenta con los temas y las peculiaridades básicas de su obra: la seriación, el tono blanco, el movimiento o el juego de luces.