Derrota dolorosa ante el CD Mirandes del conjunto albinegro, que lo intentó hasta los instantes finales (3-2)
El CD Castellón tendrá que esperar al menos una jornada más para sellar su permanencia matemática en LaLiga Hypermotion tras una derrota por 3-2 ante el CD Mirandés. Los albinegros mostraron una buena cara en la primera parte, pero se desinflaron tras el descanso, y lo pagaron caro.
Un primer tiempo con dominio pero sin eficacia
Los hombres de Johan Plat salieron con las ideas claras y se adueñaron del balón desde el pitido inicial. Durante los primeros 20 minutos, el Mirandés apenas pisó campo rival y los orelluts generaron varias aproximaciones con centros laterales peligrosos. Camara y Raúl Sánchez tuvieron las más claras, obligando al portero local Raúl Fernández a intervenir con acierto.
Pese al control del juego, fue el equipo local quien golpeó primero. En el minuto 25, Izeta aprovechó una jugada enmarañada para batir a Crettaz y poner el 1-0 en el marcador. Un tanto que cayó como un jarro de agua fría para el Castellón, que no bajó los brazos.
Los visitantes reaccionaron rápido. Mabil obligó al guardameta a estirarse y, poco después, Raúl Sánchez estrelló un disparo en el palo. La insistencia tuvo premio justo antes del descanso. En el minuto 44, una buena combinación acabó con el décimo gol del curso para Raúl Sánchez, que empató el duelo con una definición certera.
Bajada de ritmo y errores fatales
Tras el paso por vestuarios, el guion cambió por completo. El Mirandés salió con más intensidad y en el primer minuto de la segunda mitad ya generó peligro con un disparo al palo de Laucher. El Castellón, por su parte, perdió el control del balón y empezó a sufrir atrás.
En el minuto 58, Tomeo avisó con un cabezazo que Crettaz sacó con una gran parada antes de que el balón se estrellara en el larguero. Poco después, el propio Tomeo se desquitó anotando el 2-1 en una jugada a balón parado mal defendida por los albinegros.
Los cambios introducidos por Plat para buscar el empate no surtieron efecto. Al contrario, el equipo perdió orden y recibió el 3-1 en una acción nacida de un saque de banda, que acabó rematando Benito con total libertad.
Cipenga reavivó la esperanza
En el tiempo añadido, Cipenga marcó el 3-2 tras una revisión del VAR que corrigió una primera decisión del árbitro anulando el tanto por mano. Sin embargo, no hubo margen para más, ya que el Mirandés supo manejar los últimos minutos y evitar cualquier intento de empate.
El Castellón tendrá ahora una nueva oportunidad para alcanzar su objetivo. Le bastará un empate en la próxima jornada frente al Eldense para asegurar su permanencia en la categoría.
Fotografías: X @CDCastellon
