El consistorio hará frente a la subida del 3% en el canon de Reciplasa y al nuevo contrato de residuos y limpieza, que encarece el servicio en casi 800.000 euros.
. La tendencia al alza de los últimos años, que tiene un fuerte impacto en las cuentas municipales, se consolida en 2022 con un nuevo repunte que alcanzaría el 18% según las previsiones que maneja el departamento de Hacienda, y que elevaría hasta los 6 millones de euros el gasto que supone la recogida y tratamiento de los residuos y la limpieza viaria.
Este incremento se debe, por un lado, al aumento del 3% en el canon de la empresa pública Reciplasa –encargada del tratamiento de los residuos sólidos urbanos- y, por otro, al nuevo contrato de recogida de basuras y limpieza viaria, en proceso de adjudicación, que encarece el servicio en cerca de 800.000 euros con el fin de introducir mejoras que redunden en un servicio más moderno y eficiente y que den cumplimiento a la normativa del Plan Integral de Residuos de la Comunitat Valenciana. Así, si en este 2021 la recogida y tratamiento de residuos y la limpieza viaria costarán a las arcas municipales 5.048.480 euros, el próximo año la factura que pagará el Ayuntamiento de Vila-real por estos servicios se encarecerá en cerca de un millón de euros, hasta los 5.950.189 euros (+17,8%).
“La gestión de los residuos es uno de los servicios que más ha incrementado su coste en la última década algo que, unido al impacto del problema del urbanismo y la deuda que nos dejó el PP, ha lastrado la capacidad económica del Ayuntamiento”, admite el alcalde, José Benlloch. El primer edil incide en que, pese al “mazazo” que cada año supone el aumento de costes en el tratamiento de las basuras –sólo el canon de Reciplasa ha aumentado en 1 millón de euros desde 2016- “hemos hecho un gran esfuerzo para cuadrar las cuentas municipales sin recurrir a la creación de una tasa de basuras como tienen en la mayoría de municipios porque no somos partidarios de este nuevo gravamen”.
Como ya ha reiterado en varias ocasiones el alcalde, la creación de esta tasa es una opción que el equipo de gobierno descarta a pesar de que la normativa en materia de gestión de residuos en la que trabaja el Gobierno central contempla la obligación de que todos los ayuntamientos cuenten en el futuro con este instrumento de recaudación para afrontar el elevado coste de la gestión de las basuras. “Es importante que la ciudadanía conozca cuánto dinero supone tratar los residuos que se generan en la ciudad; todos sabemos que es imprescindible contar con estos servicios y garantizar el correcto tratamiento de las basuras para tener cada día una ciudad más sostenible y respetuosa con el medio ambiente pero esto comporta un esfuerzo económico que cada año es mayor”, reitera Benlloch.
Al cierre de 2021, la previsión del consistorio es que el coste de tratar en la planta de Reciplasa los residuos urbanos generados en la ciudad durante el presente año ascenderá a 2.278.833 euros, lo que supone un 11,7% más que en 2020 (240.145 euros). El balance ascendente en cinco años se traduce en un incremento de 1.011.673 euros (79,8%) en el gasto anual que supone para el Ayuntamiento de Vila-real el tratamiento de las basuras, prácticamente duplicando la cantidad que se abonó en 2016 (1.267.160 euros). La previsión para 2022, teniendo en cuenta el incremento del canon en un 3%, es que sólo el tratamiento de residuos en la planta de Reciplasa costará al Ayuntamiento de Vila-real 2.384.808 euros.
A esta cantidad hay que sumar el coste de la recogida de las basuras y la limpieza viaria, que ahora se unificará en un contrato cuya adjudicación está en trámite y que contempla un presupuesto base de 3.565.381 euros. El nuevo contrato prevé una serie de mejoras en el servicio, además de otros cambios que son obligatorios para el cumplimiento del Plan Integral de Residuos, como la introducción del contenedor de residuos orgánicos. El incremento previsto en el coste de estos servicios, con respecto a la suma de los dos contratos actualmente en vigor, es de 795.734 euros.