La mujer había acudido este miércoles a la residencia con el propósito de recoger prendas de vestir y objetos necesarios.
Un policia retirado, quien desde la mañana de este miércoles se encontraba atrincherado en Alzira (Valencia), presuntamente ha asesinado a su exesposa, a la que tenía retenida durante horas en el garaje de su vivienda, y posteriormente ha puesto fin a su propia vida. Esta información ha sido confirmada por fuentes dentro de los cuerpos policiales.
La Jefatura Superior de Policía ha comunicado que agentes de la Policía Nacional han descubierto los cadáveres del hombre y la mujer en el interior de la vivienda en Alzira, donde el hombre se había atrincherado desde tempranas horas de la mañana.
El equipo de Homicidios perteneciente a la Brigada Provincial de Policía Judicial de Valencia ha asumido la responsabilidad de llevar a cabo la investigación con el fin de esclarecer completamente los acontecimientos.
Según el relato de la familia, el día miércoles, Raquel visitó la vivienda junto a su hijo, fruto de una relación anterior, con el propósito de recoger pertenencias y enseres que necesitaba tras separarse de su pareja tras doce años de matrimonio.
A lo largo del día, agentes de la Policía Nacional llevaron a cabo un operativo en la calle Sagrada Familia de Alzira, una zona residencial. Se desplegaron efectivos del Grupo de Operaciones Especiales (GOES) y el equipo negociador de la Jefatura Superior, además de medios aéreos y miembros de la Comisaría de Alzira. Según información proporcionada por la Jefatura, se sospechaba que el hombre podría estar armado.
De acuerdo con el testimonio de la familia, mientras la mujer y su hijo estaban en la vivienda recogiendo sus pertenencias, el exmarido salió repentinamente y la condujo al garaje, donde se atrincheró con ella. Una de las amigas comentó: «Él salió en un momento y no sé qué ocurrió».
Amigas de Raquel y familiares, incluyendo a dos hermanas de la víctima, permanecieron cerca del lugar durante todo el día. Algunas de ellas llegaron a las 11:00 de la mañana, alertadas por las hermanas de Raquel, y recibieron la trágica noticia del crimen entre lágrimas.
Según informaciones municipales, alrededor de las 12:30 horas se escucharon disparos provenientes del domicilio, situado en una zona residencial de la localidad.
Una de las hermanas de la mujer compartió en la tarde con los medios que los agentes les comunicaron que estaban a la espera de que el hombre saliera del garaje para «rescatar a ambos», asegurando que se encontraban «bien». Posteriormente, la Policía condujo a las hermanas a otra área después de un control policial, donde se reunieron con los hijos de la mujer retenida. Poco después, se dio a conocer el desenlace de la situación.