Un total de 13 hospitales de la Comunidad Valenciana están participando en la implementación de una aplicación de control telemático de la psoriasis que tiene como objetivo incorporar medidas de resultados en salud a la práctica clínica real y mejorar así la calidad asistencial brindada a las personas con esta enfermedad de la piel.
El jefe de Servicio de Farmacia del Hospital General Universitario de Castellón y presidente de la Sociedad Valenciana de Farmacia Hospitalaria, Raúl Ferrando, ha destacado,
PsorUp está diseñada para lograr una mayor participación por parte del paciente en la recopilación de datos sobre su enfermedad, de modo que se genere un proceso más eficiente y se obtenga información clínica de calidad que beneficie al paciente en su proceso y en futuros estudios clínicos.
Ferrando ha señalado además que, «no podemos desarrollar una actividad sanitaria con un plan de actuación sin implicar directamente al paciente», según ha indicado la Generalitat en un comunicado.
En este proyecto participan el Hospital General Universitario de València; el Hospital San Juan de Alicante; el Hospital Marina Baixa; el Hospital General Universitario de Elche; el Hospital Vega Baja; el Hospital General Universitario de Alicante; el Hospital Arnau Vilanova; el Hospital Virgen de los Lirios; el Hospital Doctor Peset; el Hospital de Manises; el Hospital Universitario y Policlínico La Fe; el Hospital de Sagunt y el Hospital General de Castelló.
¿Qué es la psoriasis?
La psoriasis es una enfermedad de la piel inflamatoria, inmunomediada y crónica que afecta aproximadamente al 2,5 por ciento de la población española, de la que el 53% la padece en grado moderado-severo.
La psoriasis es una enfermedad crónica y no contagiosa que afecta aproximadamente al 2-3% de la población mundial. Se trata de una patología compleja que afecta tanto a la piel como a las articulaciones y puede tener un impacto significativo en la calidad de vida de las personas que la padecen.
Aunque la causa exacta de la psoriasis no se conoce completamente, se cree que está relacionada con una respuesta autoinmune del cuerpo en la que las células T del sistema inmunológico atacan las células sanas de la piel. Como resultado, las células de la piel se acumulan y se inflaman, formando las características placas rojas y descamativas.
La psoriasis puede manifestarse de diferentes formas, desde formas leves con pocas lesiones hasta formas graves que afectan a gran parte del cuerpo. Además, algunos pacientes pueden desarrollar artritis psoriásica, una inflamación crónica de las articulaciones que puede causar dolor y discapacidad.
Existen tratamientos que pueden ayudar a controlar los síntomas y mejorar la calidad de vida de los pacientes. Estos tratamientos incluyen cremas y ungüentos tópicos, fototerapia, terapias sistémicas y medicamentos biológicos.
Es importante destacar que la psoriasis puede afectar significativamente la calidad de vida de las personas que la padecen, tanto física como emocionalmente. Los pacientes pueden experimentar picor, dolor, descamación de la piel y otros síntomas que pueden afectar su bienestar psicológico. Por esta razón, se recomienda una atención integral y un abordaje multidisciplinario que incluya no solo el tratamiento médico, sino también el apoyo emocional y psicológico para los pacientes.
El jefe de Dermatología del Hospital General de Castelló, servicio que también ha participado en este proyecto, Gerard Pitarch, ha resaltado que «se trata de una de las patologías más prevalentes en dermatología y tiene un alto impacto en la calidad de vida de las personas, no solo a nivel físico».
Las personas diagnosticadas con psoriasis manifiestan cambios en su estado de ánimo y en sus actividades de ocio, sus relaciones sociales, de pareja, laborales y escolares.
Consejos para cuidar la psoriasis
Las personas con psoriasis pueden desarrollar artritis psoriásica, que es una inflamación crónica de las articulaciones. Además, este grupo de pacientes tiene mayor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares. Por eso, los expertos aconsejan seguir una dieta rica en alimentos frescos, disminuir la ingesta de grasas saturadas animales y priorizar alimentos con alto contenido antioxidante, y evitar el consumo de alcohol y tabaco.
La exposición al sol durante un breve periodo diario puede ayudar a las personas con psoriasis, evitando las horas de máxima intensidad, entre las 12:00 del mediodía y las 16:00 de la tarde, y utilizando una protección adecuada.
Asimismo, se aconseja llevar a cabo una buena higiene de la piel, evitando geles y champús agresivos, el uso de esponjas y aplicar regularmente cremas hidratantes, junto con el cumplimiento adecuado del tratamiento tópico y sistémico.
